El Ayuntamiento mejora la accesibilidad en la avenida de Castilla-La Mancha

Con el objetivo de mejorar la movilidad de los peatones, garantizar la seguridad de los viandantes y facilitar el paso a personas con movilidad reducida, carritos de bebé, sillas de ruedas, maletas o carros de reparto, el Ayuntamiento de Toledo ha finalizado los trabajos iniciados hace unas semanas en la avenida de Castilla-La Mancha, según informó ayer el propio Consistorio en nota de prensa.

La intervención en esta zona ha consistido en un tratamiento integral para garantizar la seguridad de los viandantes y permitir el tránsito normalizado de los peatones, además de ofrecer una imagen más ordenada y cuidada de uno de los principales accesos a la ciudad y donde también se ubican establecimientos hoteleros.

Se trata de una actuación muy demandada por los vecinos y usuarios de esta vía así como por la asociación de vecinos «San Antón», debido a los problemas de movilidad que había y por los aparcamientos de vehículos que invadían el espacio reservado para los peatones.

Presupuesto: 25.000 euros

Con un presupuesto cercano a los 25.000 euros, los trabajos han consistido en la reordenación de los aparcamientos, ampliación de los tramos de aceras, rebajes de los bordillos, reposición de pasamos, reubicación de elementos urbanos y del contenedor de basura existente e instalación de pivotes en la parte superior para evitar que los vehículos invadan el espacio delimitado para el peatón.

El número de plazas de aparcamiento se ha respetado y se va a incluir una reservada a personas con discapacidad. Además, se ha conectado a la red de saneamiento un pozo de aguas pluviales, al tiempo que se mejora la seguridad en la zona al permitir un paso cómodo por la acera para evitar que los usuarios caminen por la zona más cercana a la carretera.