Educación
Recogen firmas contra el nuevo correo electrónico de la Universidad de Sevilla
Profesores y alumnos se quejan de que el cambio de servidor provoca que no lleguen los email o que vayan directamente a la bandeja de basura
El nuevo servidor del correo electrónico en la Universidad de Sevilla, cambiado hace unos meses del correo institucional de Buzonweb a Outlook, está generando muchos problemas de lentitud, por mensajes que no llegan , problemas de búsquedas o incluso algunos que se van directamente a la carpeta de correos basura. Hasta el punto de que el tema, que también salió a relucir en la reunión de la pasada semana en la que el rector, Miguel Ángel Castro, presentó su informe de gestión al claustro, se ha plasmado en una recogida de firmas pidiéndole al rector que mantenga el sistema antiguo.
A través de la plataforma change.org hay una petición de firmas (que ya ha logrado más de 708 apoyos) en la que se solicita mantener el sistema de correos antiguo y se denuncia lo que se considera una «desastrosa externalización» llevada a cabo el pasado mes de julio y que ahora está en manos de la norteamericana Micosoft.
Según denuncian los promotores de esta iniciativa, la Asociación de Personal Docente e Investigador de la Universidad de Sevilla, Adius, el nuevo sistema sigue provocando muchos problemas de pérdida de mensajes y no gestiona adecuadamente los correos basura, catalogando dentro de la carpeta de estos últimos muchos correos válidos en incluso algunos procedentes de comunicaciones institucionales.
En riesgo
Los denunciantes se quejan de que tras el cambio, todos los datos y correos de la universidad se encuentran en la nube de una empresa tecnológica extranjera, algo que consideran que «pone en riesgo» datos sensibles como patente s, artículos, ideas o documentos de trabajo.
Además, insisten en defender que el anterior sistema (buzonweb) era más fácil de usar para cualquiera y hacía uso de estándares públicos y de formatos abiertos. «Era estable, práctico y sencillo de manejar y gestionar por cualquier ordenador, independientemente de su sistema operativo o de su antigüedad», dicen los denunciantes.
En este sentido, se hace hincapié en el hecho de que el sistema anterior posibilitaba la independencia tecnológica y evitaba «estar atados a las decisiones y costes que considere oportuno ninguna empresa».
La petición de firmas incide también en denunciar que el anterior contrato fomentaba el empleo a nivel local y en el hecho de que hasta ahora había funcionado bien. Por ello solicitan a la Universidad de Sevilla «la total e inmediata y completa restitución» del sistema antiguo de gestión de correo electrónico para toda la plantilla así como unos nuevos recursos humanos suficientes para mantenerlo.
Dificultades
El tema está provocando muchas quejas en la comunidad universitaria que muestran su malestar por el funcionamiento del email porque, según dicen, desde el cambio ha dejado de funcionar. Las quejas de profesores y alumnos también han provocado un escrito de Comisiones Obreras en parecidos términos porque consideran «un desatino» pagar por un nuevo servidor cuando ya existía uno propio y que encima no funcione. «Se pierden casi todos los mensajes», afirmaba Teresa López, portavoz de CC.OO. en la US.
Los denunciantes han dado el paso de iniciar una recogida de firmas porque lo consideran la forma «más efectiva» de que el equipo de Gobierno de la Hispalense, cuyo claustro será disuelto la próxima semana y comenzará el proceso de renovación de los órganos de gobierno, sea consciente de la cantidad de problemas que se están ocasionando. Tras la defensa de su informe de gestión y cuando un catedrático cuestionó por este tema al rector, Miguel Ángel Castro, mostró sus disculpas por «las dificultades» del nuevo sistema.
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