Arguiñano es un pionero de los programas de cocina en televisión
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Karlos Arguiñano: «La mejor dieta es comer la mitad»

A sus 66 años, este cocinero está en plena forma. Su secreto, una comida sana, al estilo mediterráneo como «predica» desde la tele

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Al margen de su programa diario en Antena 3 y su pasión por la pelota vasca y las motos, Karlos Arguiñano no para de escribir libros con los que acercar a los aficionados a la cocina. El último, «En familia con Karlos Arguiñano», recoge más de 350 recetas con todo el aroma y sabor hogareño. Asegura que su primer recuerdo ante los fogones fue cuando tenía doce años, «en casa, siguiendo las indicaciones de mi “ama” para preparar una salsa de tomate».

Nacido en Beasáin (1948), Arguiñano reside desde joven en la villa costera guipuzcoana de Zarauz, donde tiene su afamado hotel-restaurante, «su fortaleza», que abrió allá por 1978. Además, para que su huella quedara firme, en 1996 inauguró, en esta misma localidad, la escuela de hostelería Aiala.

A pocos meses de cumplir 67 años, el cocinero vasco, como en la película de Martínez Soria, está hecho un chaval. ¿Su secreto? Una comida sana y dictada por las reglas de la dieta mediterránea: «Verdura, fruta, aceite de oliva y vino. Es equilibrada y con muchos años de existencia».

Y añade que su truco para mantenerse en forma con la comida es «comer en plato pequeño, para así comer la mitad». Su famoso método «CLM». «La mejor dieta se encierra en tres iniciales CLM, o lo que es lo mismo “Comer La Mitad”. Pero eso sí, comer de todo, variado, sin abusar de las cantidades. Levantarnos de la mesa sin tener la sensación de estar llenos. Y luego hacer ejercicio».

Su ejercicio consiste en caminar «al menos un par de horas todos los días». Aunque no tiene ninguna enfermedad que le obsesione, señala que su punto débil son «las cervicales, se ve que por la edad y mi trabajo (mucho tiempo de pie). Suelo padecer alguna molestia en esa zona y algunas veces dolores». ¿Su vicio confesable? «la casquería; pero con moderación». Por último, fiel a su sentido del humor, al que tiene tan acostumbrados a sus seguidores en televisión, Arguiñano asegura que su mejor terapia antiestrés es la risa. «Recomiendo reírse un ratito todos los días».

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