PARCELISTAS. En los juzgados el pasado enero. / CRISTÓBAL
Jerez

«Empezamos a ver la luz al final del túnel»

Con satisfacción moderada. Así podría decirse que recibieron ayer los parcelistas de los huertos de ocio (San José Obrero) la noticia de que el Ayuntamiento ha remitido un escrito al Juzgado en el que le pide que inicie el proceso para fijar la indemnización que debe pagarles. Entienden que era un paso obligado -aunque el retraso en darlo les hacía dudar-, pero no descartan de esta forma que el ente local esté buscando realmente dilatar aún más el proceso correspondiente.

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El portavoz de los parcelistas, Guillermo Romero, reconocía que se trataba de «una buena noticia, extraordinaria, porque por fin empezamos a ver la luz al final del túnel después de más de cinco años de lucha». Pero recordaba que esto no frenaba el proceso penal abierto por este mismo caso, una vía judicial que cabe recordar que podría determinar la responsabilidad directa de algunos de los pesos pesados de la política local en las expropiaciones realizadas y que han sido declaradas nulas.

Romero insistía ayer en que «esas personas deben pagar por lo que hicieron», en referencia a Pilar Sánchez, Pedro Pacheco y María José García Pelayo, entre otros. «Que también paguen por lo penal, para que quede claro que no se pueden reír del pueblo y que no nos pueden tomar por tontos», apuntaba.

Cabe recordar que son 35 los parcelistas afectados. En un principio eran 44, pero algunos de ellos desistieron de seguir con el proceso judicial y acabaron aceptando los pagos propuestos por el Ayuntamiento de Jerez en su momento por sus parcelas.

Han sido para todos ellos prácticamente cinco años y medio de «una lucha muy dura», sobre todo teniendo en cuenta que «la mayoría de nosotros somos personas mayores», explicaba Guillermo Romero, de 72 años de edad. «Y, además de todo el jaleo, lo que nos ha costado de nuestros bolsillos, porque llevar este tema en los juzgados no es nada barato», añadía.

Pero ese sufrimiento ha comenzado a darles las primeras recompensas. Primero con las sentencias favorables (la última del TSJA el pasado mes de enero) y ahora con la disposición del Consistorio, aunque sea obligada, a asumir las indemnizaciones que le toquen. Por todo ello, están dispuestos a dar una tregua en sus movilizaciones y a dejar en el aire su decisión de encerrarse en la Delegación de Urbanismo.