Los Lakers persiguen el anillo de Miami

Cerrar la peor pretemporada de la historia de la franquicia, tras perder los ocho partidos disputados, y lidiar con el demoledor dato de que nadie en la larga trayectoria de la NBA ha llegado a las finales con semejante arranque, no parecen ser razones de peso para preocupar a unos Lakers que han hecho todos los esfuerzos a su alcance para arrebatar el anillo a los vigentes campeones, los Heat de Miami. Los dirigentes de la franquicia consideran que lo importante en estos momentos es que las piezas del espectacular puzzle que han creado encajen poco a poco para alcanzar su máximo nivel en los 'playoffs'.

El equipo angelino ha sido el gran agitador del mercado de fichajes y se ha ganado volver a contar entre los grandes favoritos al título en el campeonato que este martes comienza. Los púrpura y oro se han hecho con el más deseado, el pívot Dwight Howard. Todos lo tentaban y él quería cambiar Orlando por Brooklyn. Pero ha acabado en California y, junto a Pau Gasol, formará una pareja temible bajo los aros. Pero Jerry Buss, propietario de la franquicia, no se ha conformado con 'Superman' y ha apostado por incorporar además a dos ilustres veteranos para fortalecer la posición de base, que tantos problemas ha dado a su equipo en los últimos tiempos, y el banquillo, abocado a la crítica fácil por la escasa aportación en momentos importantes. El primero de ellos es el canadiense Steve Nash, uno de los grandes directores de juego de la historia, mientras que Antawn Jamison aportará su talento ofensivo como sexto hombre.

Mike Brown dispone de un 'roster' de impacto inmediato, con la vista puesta en que Kobe Bryant pueda superar los seis anillos que obtuvo Michael Jordan. La estrella angelina ya tiene una mano completa pero, a sus 34 años, empieza a ver recortadas las oportunidades para sumar alguna joya más.

Pero los expertos no se han dejado llevar por las burbujas californianas y mantienen en lo más alto de la lista de candidatos al campeón. Los Heat han convertido su trío fantástico -LeBron James, Wade y Bosh- en un nuevo 'Big Four' al sumar para la causa a Ray Allen, que espera que Miami le aporte el calor que le habían negado en la última campaña en Boston. Basta con la suma del mejor tirador puro de la liga para sentir aún más el poderío de los de Spoelstra. Poco les importa la falta de refuerzos interiores, ya que cuentan con el 'MVP' James, liberado y desatado tras el desahogo que le supuso el pasado anillo, para jugar en donde sea necesario.

El tercer aspirante con más galones y apoyos entre los analistas es el finalista Oklahoma. Los talentosos Thunder tienen una campaña más de experiencia y siguen sumando de cara a conformar una franquicia campeona. Ha hecho lo posible por mantener a su triángulo mágico. Sin embargo, los millones gastados en Kevin Durant -el jugador con más talento de la competición-, Russell Westbrook y el 'ÑBA' Serge Ibaka, han sido demasiados y han provocado el traspaso del eléctrico James Harden a Houston. Si la salida de la plantilla de la barba más famosa de la liga no rompe la química de un equipo que funcionaba con unos códigos de fraternidad universitaria, serán los grandes rivales de los Lakers en el Oeste.

Pelea entre vecinos

Entre el resto de franquicias se pueden vislumbrar algunas con razones suficientes como para postularse al triunfo final. En el Este, los siempre competitivos Celtics y los Bulls (si recuperan al mejor Derrick Rose) tienen cosas importantes que decir. Divertida parece también en esta conferencia la pelea entre los dos vecinos de la Gran Manzana. Mientras los Knicks presentan una de las plantillas más veteranas de la historia, los Nets han montado un equipo seductor en su estreno en su nueva casa de Brooklyn.

En la banda contraria, los eternos Spurs, los reforzados Clippers, Nowitzki y sus Mavericks o los sólidos Grizzlies de Marc Gasol pueden animar la competición.

La delegación española en la NBA se mantiene un año más con seis componentes. En esta ocasión, la novedad es la incorporación de Víctor Claver a unos renovados Blazers, en los que intentará explotar definitivamente y mostrar sus tremendas condiciones para este juego. Junto a los hermanos Gasol -con un Pau que vislumbra un futuro más tranquilo que el año anterior y con Marc instalado entre los grandes pívots de la liga- e Ibaka, volverán a estar Ricky Rubio -cuyo objetivo principal es recuperar la rodilla lesionada y regresar con el mismo nivel anterior- y José Manuel Calderón, al que le espera un año difícil que puede acabar con el extremeño vistiendo un traje distinto al de los Raptors.