'El banquero de los pobres'

Un tribunal de Bangladesh ratifica la destitución de Yunus

Rechaza el recurso que el fundador de un banco pionero de microcréditos presentó contra una decisión gubernamental que lo destituyó

NUEVA DELHI Actualizado: Guardar
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Un tribunal bangladeshí ha desestimado el recurso presentado por Mohamed Yunus contra su destitución al frente del banco de microcréditos del que es fundador, decidida la semana pasada por el Banco Central de Bangladesh, ha informado una fuente de su entidad.

Un panel del Tribunal Superior de Dacca, constituido por los magistrados Momtaz Udin Ahmed y Gobinda Chandra Tagore, ha dictaminado después de tres días de audiencias que la posición de Yunus como director ejecutivo del Grameen Bank (GB) durante la última década ha sido ilegal, tal y como alegó el Banco Central.

Yunus -ganador del Premio Nobel de la Paz en 2006- y su banco recurrirán esta decisión ante el Tribunal Supremo, ha confirmado la fuente de su entidad. Según el Banco de Bangladesh, cuando Yunus renovó su cargo de director ejecutivo al frente del Grameen Bank hace once años, no contó para ello con la aprobación previa del organismo central, una condición estipulada en las ordenanzas del propio banco.

En el punto de mira

Yunus se ha visto salpicado desde finales de 2010 por una campaña de desprestigio en su contra auspiciada por el Gobierno del país surasiático, al calor de un documental de la televisión noruega que denunció un supuesto trasvase ilegal de fondos entre dos entidades del Grupo Grameen.

La primera ministra bangladeshí, Sheikh Hasina, llegó a calificarle de "chupasangres" y ordenó la apertura de una comisión de investigación sobre todas las actividades del GB y de otras empresas del grupo con la excusa de esa irregularidad, mientras que el ministro de Finanzas, Abul Muhith, instó al conocido como "banquero de los pobres" a tomar la iniciativa de jubilarse.

La escena política bangladeshí está dominada desde hace dos décadas por Hasina y la ahora opositora Khaleda Zia, dos herederas de dinastías políticas que vieron con malos ojos que Yunus intentara abrir una tercera vía con la formación de un partido antes de las elecciones de 2008.