Caja Duero y Caja España retoman el proceso de fusión

Los consejos de administración de Caja Duero y Caja España volvieron a reunirse ayer para buscar una salida a su fusión. Sin embargo, el diálogo mantenido durante horas no dio con la solución definitiva. En consecuencia, habrá más encuentros. La rivalidad por el organigrama y la localidad que debe acoger el emplazamiento de la sede social de la entidad resultante impiden cerrar la operación.

El Banco de España tiene un mensaje contundente para ambas entidades: están condenadas a entenderse, y en un plazo de tiempo corto. Asimismo, la Junta de Castilla y León ha instado a ambas partes a procurar cuanto antes el acuerdo.

El de ayer fue el cuarto encuentro entre las dos cajas en el Parador de Tordesillas. A la reunión asistieron cuatro miembros de la comisión negociadora de Caja España y seis de la de Caja Duero. En el orden del día, figuraba en un lugar prioritario el reparto de los órganos de dirección de la entidad resultante.

Desde Caja España se intenta que León sea la sede social. Por su parte, Caja Duero pugna por Salamanca como centro organizativo. La primera se inclina por una dirección bicéfala, mientras que la segunda apuesta por una sola dirección general.