Cala del Sol y las negociaciones rotas

Para la mayoría de afectados de la promoción de viviendas Cala del Sol, ubicada en la Ronda del Estero, la noticia de que uno de los propietarios (Benito González) se queda con la mayoría de los pisos ha caído como un jarro de agua fría. Nuevamente, tras varios procesos, ven peligrar sus viviendas, aquellas de las que esperan desde hace más de dos años las llaves.

Los dos bloques han experimentado tanto oleadas de esperanzas como de nerviosismo ante las diferentes negociaciones que se han ido realizando para intentar desbloquear la situación.

Se hablaba de la posibilidad de que la entidad bancaria del segundo bloque, Unicaja, rompiera sus relaciones con Aifos para crear una cooperativa con los afectados y seguir con las obras, pero de eso hace un año y nada se ha avanzado. El bloque de ladrillos, al que le queda más de un año de trabajo, sigue paralizado y sus compradores no tienen ningún tipo de noticia al respecto.

Además, temen que se lleve a cabo el concurso de acreedores y sea otra empresa la que se quede con un bloque. Una posibilidad más remota en el caso del bloque uno, del que ahora es propietario Benito González. En este caso, todo parecía apuntar a que Aifos resolvería sus problemas con la entidad bancaria con la intención de sumar casi un millón de euros en total a las cantidades ya pactadas y que los propietarios, como pudieran, se hicieran cargo, pero los embargos no permitían ejecutar esa acción. Ahora no existen y tampoco Aifos tiene potestad para negociar al perder al propiedad sobre las viviendas.