La demolición de la antigua cárcel se producirá en otoño

La antigua cárcel de La Asunción tiene los días contados, y no se trata sólo de una mera declaración de intenciones de la diputada socialista, Mamen Sánchez, que ayer puso fecha concreta a la demolición: se llevará a cabo el próximo otoño. Una actuación esperada por vecinos de la zona, con la que se pondrá fin a cantidad de incidentes relacionados con el estado de abandono de la parcela, pero sobre todo importante porque supondrá un paso más en la creación de la Comisaría conjunta.

Como explicó Sánchez, el derribo no se hará a través de una explosión controlada sino mediante la maquinaria adecuada, y como ya se comprometió con la comunidad educativa del CEIP La Paz, una parte de los terrenos estará destinada a la ampliación del mismo, aunque el proyecto aún está por concretar. El que si está finiquitado es el de la demolición, que durante este mes tiene que pasar por la supervisión técnica para que se puedan iniciar en verano los periodos de licitación y adjudicación de obras.

En lo que respecta a la Comisaría, la diputada volvió a recordar que el proceso se encuentra a expensas de la venta de los edificios del Ministerio del Interior en la ciudad, algo que espera se produzca en el periodo de tiempo más corto posible.

Petición de voto

La socialista realizó estas declaraciones durante el balance ofrecido a los medios de comunicación con motivo del cierre de campaña de las elecciones europeas. En su comparecencia, expuso varias razones a la hora de argumentar el voto para su partido, todas ellas cimentadas en los errores cometidos por el principal partido de la oposición, el PP.

Así, Sánchez aludió a una Europa «cada vez más conservadora», con problemas que sólo se podrán afrontar debidamente desde la izquierda. «Si la izquierda no va a votar permitiremos la dominación de la derecha, cuando ellos proponen medidas que suponen una vuelta atrás al Siglo XIX». En este sentido, se refirió a la ampliación de la jornada laboral y al fomento de los paraísos fiscales, sin olvidar que «la ideología conservadora nos ha llevado a la crisis».

Otra de las razones que esgrimió fue el hecho de que el año que viene España presidirá el Consejo de la Unión Europa, por lo que incidió en la conveniencia de contar con una mayoría de diputados socialistas que impulse soluciones a la crisis financiera, y medidas encaminadas a la protección social y el cambio climático. No en vano, Sánchez subrayó que las iniciativas económicas del Gobierno español «están dando los primeros frutos», aunque «aún hay mucho por hacer».

El último razonamiento en el que centró su alegato fue el interés partidista de los populares, que a su juicio tienen las miras puestas en otros objetivos. «Al PP no le interesan estas elecciones, y sabe que la única posibilidad de ganar es que la gente de izquierdas no vaya a votar. Si ganan lo interpretarán como una absolución social por sus casos de corrupción». En resumen, la diputada sentenció que «hay que votar a representantes que defiendan derechos para todos, en vez de privilegios para unos pocos».

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