Zapatero estrenará en Andalucía su nuevo modelo económico para España

Los primeros sondeos sobre la intención de voto cara a las elecciones europeas del próximo 7 de junio deparan un empate técnico entre PSOE y PP, además de un preocupante porcentaje de abstención.

Ante este panorama, los socialistas han optado por un enroque estratégico: garantizar la victoria en sus feudos más fieles, con Andalucía como máximo exponente.

José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno central y secretario general del PSOE, tuvo un gesto de calado con los andaluces al comprometerse ayer, ante más de 20.000 correligionarios que le arroparon en un mitin en la localidad sevillana de Dos Hermanas, a desplegar en Andalucía las primeras medidas de la Ley de Economía Sostenible -que anunció en el pasado debate del Estado de la Nación- , una vez que la pacte con patronal y sindicatos y logre que se apruebe en el Congreso de los Diputados.

Rodríguez Zapatero avanzó que este nuevo modelo económico para España comenzará a aplicarse en territorio andaluz el primer semestre de 2010, coincidiendo con al presidencia española de la Unión Europea. «Cambiar cemento por conocimiento y petróleo por energías renovables». Este será, según el presidente español, dos de los vectores de esta iniciativa.

Andalucía sostenible, así se llama el programa especial que se desarrollará en esta Comunidad autónoma con un primer objetivo: convertir a esta región en pionera de este nuevo patrón de crecimiento económico en España que, según enfatizó el presidente español, será respetuoso con el medio ambiente, potenciará la investigación, el desarrollo y la innovación y posibilitará la creación de más empleos, más dignos, estables y con mejores salarios. Andalucía sostenible será aprobado en un Consejo de Ministros extraordinario que se celebrará, presumiblemente en Sevilla, antes de que concluya este año.

«¿Por qué en Andalucía?», se preguntó Rodríguez Zapatero ante un auditorio que ovacionó en repetidas ocasiones. Él mismo se respondió: «para demostrar que este pueblo, al que marginaron históricamente, es el mejor y el primero en hacer una economía moderna, innovadora y de futuro».

Rodríguez Zapatero recalcó la histórica apuesta del PSOE con esta tierra. Sacó a colación la llegada del AVE en 1992 y comparó su notable efecto en el desarrollo de la Comunidad con el que tendrá Andalucía sostenible.

El número uno del PSOE también recalcó otras promesas realizadas en campaña electoral en Dos Hermanas, alguna de ellas, como las de 2004, cuando no todos apostaban por el triunfo de Rodríguez Zapatero en las generales. El presidente del Gobierno central enumeró alguno de estos ofrecimientos consumados, como el pago de los 2.500 millones de euros en 2004, que los andaluces habían reclamado al Gobierno de José María Aznar al entender que había borrado del censo a más de 400.000 andaluces.

Rodríguez Zapatero también se refirió a la garantía, recogida en el Estatuto, sobre las inversiones del Estado en Andalucía, que deben equipararse a su peso poblacional. Con esta premisa, esta región, con casi ocho millones de habitantes, es la que más dinero debe recibir. Los dos últimos Presupuestos Generales del Estado -4.000 millones de euros en 2009- así lo han corfimado. Un análisis similar hizo en relación a los fondos procedentes de la Unión Europea que, según explicó, permitirán a Andalucía disfrutar de 11.000 millones de euros -entre 2007 y 2013-.

La última referencia se la dedicó a la Disposición Adicional Segunda del Estatuto de Autonomía. «Hemos llegado a un acuerdo -el importe final asciende a 1.204 millones de euros- y dentro de muy poco Andalucía dispondrá del pago de la deuda histórica, remachó el líder del Ejecutivo español».

«Que Arenas siga»

El acto de ayer tuvo otros significados en clave de política andaluz. Se trataba de la primera ocasión en la que se ha podido ver y oír juntos a José Luis Rodríguez Zapatero, Manuel Chaves y José Antonio Griñán, tras el relevo que se produjo hace poco más de un mes en la Presidencia de la Junta de Andalucía.

El secretario general del PSOE refrendó de forma explícita la apuesta por Griñán. Confesó que entiende que este cambio haya podido dejar un sabor agridulce a muchos andaluces. La parte agria, según Rodríguez Zapatero, ante el regreso de Chaves a la política nacional, mientras que la dulce sería el acierto en la elección de José Antonio Griñán. Sobre si el actual inquilino de la Casa Rosa será o no el candidato del PSOE en las autonómicas en 2012, el máximo dirigente socialista terció en favor del sí, aunque sin referirse de forma directa al asunto.

«¿Arenas, que ha perdido ya tres elecciones, es todo lo que tiene el PP para Andalucía?», exclamó Rodríguez Zapatero, tras criticar que el presidente del PP-A haya intentado deslegitimar a Griñán. «Por nosotros, que Arenas siga cuanto quiera, pero el futuro de Andalucía no está en Arenas, el futuro está en José Antonio Griñán», sentenció el líder de los socialistas.