Navantia se reunirá con los alcaldes de la Bahía para explicarles su posición

El conflicto que mantienen la dirección de Navantia y los trabajadores de la compañía ha llegado a una nueva administración. Si el pasado miércoles, fue la Diputación Provincial la que escuchó a una representación de la plantilla para, posteriormente, expresar su apoyo a las reivindicaciones de los empleados, en la jornada de ayer le tocó el turno a los ayuntamientos. Los regidores de Puerto Real y San Fernando, José Antonio Barroso y Manuel María de Bernardo respectivamente, se interesaron al respecto ante el presidente de Navantia, Juan Pedro Gómez, durante el acto de botadura en el astillero isleño de un buque que se construye para la Armada venezolana.

Los tres mantuvieron una reunión informal en la que Gómez, según indicó Barroso, se comprometió a reunirse con los alcaldes de las localidades que cuentan con centros de trabajo de la compañía. El alcalde puertorrealeño explicó que hoy enviará un borrador de solicitud de entrevista con el presidente de la constructora naval a la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, y a De Bernardo para que le den su visto bueno y proceder cuanto antes a su firma y envío. Este encuentro con el directivo de Navantia en Madrid aún no tiene una fecha fijada, aunque Barroso manifestó que se producirá antes de que acabe el mes de octubre o, a más tardar, en la primera semana de noviembre.

Protestas

Los trabajadores del astillero se concentraron en las inmediaciones del buque que iba a ser botado y extendieron varias pancartas en las que exigían un plan industrial y recriminaban a Gómez por su gestión al frente de la compañía. El presidente de la empresa fue recibido por este colectivo con dos sonoras pitadas, una a su llegada y otra cuando abandonó la zona en la que tuvo lugar el acto de botadura. El directivo de la constructora naval se quejó de esta actitud y acusó a los empleados de poner en peligro la imagen comercial de la empresa en un acto público como el de ayer.

Gómez explicó que la petición de aumento de la plantilla no es posible porque la Comisión Europea lo prohíbe hasta fin de 2014 y que, aún haciéndolo se incurriría en la descapitalización de los recursos humanos de la empresa al obligar a hacer prejubilaciones para cumplir la imposición de la UE. El presidente del comité de empresa del centro de trabajo de San Fernando, José Antonio Oliva, contestó que es la gestión de Gómez la que descapitalizando a la compañía y auguró que el año 2008 se cerrará con pérdidas millonarias.

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