El palacio del chocolate belga

Thomas Remondt es un joven belga que lo dejó todo en su país por amor. Hace un año trabajaba como operador de cámara para cine y televisión en Bélgica cuando la suerte quiso que se enamorara de una jerezana, mientras su productora grababa un reportaje en la ciudad.

Fue entonces que a Thomas, una vez decidido a asentarse en tierras españolas, se le ocurrió poner en marcha una iniciativa empresarial inexistente hasta entonces en la ciudad. Así nació Oro Negro Chocolate. Se trata de un establecimiento en el que Thomas ofrece a los jerezanos los mejores chocolates belgas, y que «sólo existía una tiendas en Cádiz y otra en Sevilla, pero está lejos para ir sólo a comprar chocolate».

Todas y cada una de estas delicias son muy típicas de Bélgica, y nada tienen que ver con las que se pueden adquirir en algunos centros comerciales de la ciudad. «Yo trabajo únicamente con las marcas Galler y Charlemagne, porque elaboran los pedidos de forma muy personalizada. Si, por ejemplo, les pido 20 kilos de bombones, pues me los fabrican en tres o cuatro días. De esta manera, ofrecemos productos mucho más frescos».

Thomas cuenta que en su país es muy habitual toparse con tiendas de chocolate, «es muy típico, pero son mucho más bonitas que la que yo he abierto en Jerez». Y es que allí casi estos palacios del chocolate belga están decoradas de madera, porque también «el clima lo requiere». En Oro Negro Chocolate, Thomas ha intentado simular lo máximo posible a los establecimientos de su país «he pintado la pared de marrón chocolate y he escogido muebles poco vistos en Jerez».

Sin lugar a dudas, Oro Negro Chocolate es un auténtico palacio para los amantes de los bombones. Delicias de chocolate caliente -también para tomar en el local-, negro puro, con leche, blanco, de tiramisú, de champangne, de lavanda, de violeta o exquisitos helados son algunas de las propuestas de Thomas, y que «son aptas para todas las épocas del año. No porque estemos en verano se ha de dejar de degustarlos. Sólo hay que mantenerlos a unos 19º C fuera del frigorífico» y listos para tomar...