INSTITUCIONES PENITENCIARIAS
La prisión de Alcolea, filas alternas y separación entre presos para frenar al Covid-19
La directora del centro penitenciario ha reservado un ala del módulo de ingreso para cuarentenas de internos
El centro penitenciario de Alcolea vive el estado de alarma por el coronavirus desde la tranquilidad, sin positivos, sin bajar la guardia y sin incidentes regimentales . Los funcionarios han recibido el material de protección destinado por el Estado y la Junta de Andalucía y en Córdoba han habilitado un ala en el módulo de ingresos para albergar cualquier interno de ingreso o reingreso donde permanecen 14 días en cuarentena.
La directora del Centro Penitenciario de Córdoba , Yolanda Gonzáez , en declaraciones a ABC, ha lanzado un mensaje de optimismo y ha agradecido tanto a los funcionarios de prisiones como a los internos que se vuelquen para frenar la entrada del Covid-19 a Alcolea. La tarea, sin embargo, admite que es titánica. Sin ir más lejos, la Unidad Militar de la BRIX pasó la semana pasada varias jornadas desinfectando cada uno de los espacios de la prisión, desde pasillos a celdas, comedor u oficinas. La responsable del centro penitenciario cordobés admite que se trata de un trabajo muy duro y minucioso en el que se han redoblado esfuerzos, como en el caso de la lavandería y limpieza. Los presos mantienen las distancias de seguridad, las filas se hacen alternas, y al comedor en grupos minúsculos por turnos y guardando dos metros entre ellos.
Los internos del centro penitenciario de Alcolea han asegurado a la dirección del centro cordobés que se sienten «seguros», un mes después de que uno de los funcionarios diera positivo al Covid-19, mientras se encontraba de vacaciones. Instituciones Penitenciarias asegura a ABC que a fecha de este miércoles 15 de abril no hay ningún preso positivo al Covid-19 en el centro penitenciario cordobés.
Curiosamente, afirman fuentes penitenciarias a ABC, pese ha haber unos 1.300 presos no hay ningún contagio. En este sentido, la vida de prisión sigue prácticamente igual, pero sin el acceso de las entidades que ayudaban en distintas labores en el centro penitenciario. La directora del centro penitenciario asegura que se están haciendo esfuerzos para que a través de videollamada los presos puedan contactar con entidades como Proyecto Hombre o los religiosos que atienden a los presos, así como el Sistema de Asistencia Jurídica, que clausuraron con la entrada en vigor del estado de alarma, y que se ha empezado a retomar a través de ese sistema.
Ensayo de mascarillas
La prisión ha hecho una gran labor de sensibilización con la situación tanto con los presos como los funcionarios, y está funcionando, asegura González, al frente de más de medio millar de funcionarios y 1.300 internos . La solidaridad también ha aflorado en prisión donde se han comenzado ensayos para elaborar mascarillas, con telas donadas por una empresa de Villa del Río, pero aún falta que se instale el proceso de esterilización de las mismas.
Las medidas implantadas por el Ministerio de Interio r sí han supuesto cambios sustanciales, como el hecho de que todos los presos que cumplían el tercer grado en el Centro de Inserción Social (CIS) se hayan quedado con control telemático a través de pulseras o videollamadas desde sus casas. «Estos presos están totalmente localizados telemáticamente con llamadas y con los dispositivos cumpliendo a rajatabla el confinamiento en sus hogares», asegura la responsable de Alcolea.
El principal cambio para los reclusos ha sido la suspensión de todas las comunicaciones familiares , de convivencia e íntimas. Como contrapartida, las llamadas semanales se han incrementado de 8 a 15, así como los smartphones disponibles en los distintos centros penitenciarios para hacer videollamadas a sus familiares. Las llamadas son gratuitas para quienes no tengan recursos económicos, teniendo prioridad los presos con familiares enfermos o en situación de vulnerabilidad, según han informado a ABC fuentes de Instituciones Penitenciarias.
Entre las nuevas reglas impuestas por el Covid-19 está la prohibición del acceso a todo personal no funcionario, laboral o personal extra penitenciario cuya labor sea imprescindible. Queda excluida por tanto la entrada a voluntarios de ONG, entidades colaboradoras, profesionales acreditados, etc…
En cuanto a la actividad docente se estará a lo dispuesto por las diferentes administraciones educativas. Se suspenden los traslados intercentros, salvo aquellos que obedezcan a razones excepcionales, sanitarias o judiciales.
Se cancelan además las salidas programadas, así como el resto de salidas tratamentales, que se comunicarán a Vigilancia Penitenciaria en el caso de que hubiesen sido autorizadas por dicho órgano.
Noticias relacionadas
