PAN PARA HOY

BISIESTO

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Damos la bienvenida al mes dos del año mariano, más conocido como febrero, o el mes que generalmente, por su ausencia de festividades relevantes - el carnaval no es cosa nuestra- suele ser de transición entre las navidades y la Semana Santa. Esto suele ser lo normal, siempre cuando entendamos como normal que este mes que hoy empieza a tocarnos las narices tenga veintiocho días en lugar de treinta como todos. Por cierto, creo que es momento de que alguien diga algo, y ya que estoy metido en vereda lo digo yo: ¿por qué es tan corto febrero? No respondan todos a la vez. Y bueno, lo que ya no tiene explicación posible es lo de la coña del bisiesto que nos toca este año; curiosamente cuando peor nos viene. O sea que está la gente haciendo malabares para llegar a fin de mes y para uno que tenemos corto lo alargamos con un día de regalo, como la bola extra de los petacos. Vamos a meternos en camisas de once varas: ¿entienden ustedes el lío de los años bisiestos? Yo debo ser de letras puras o experto en recreos, el caso es que no he logrado entenderlo a pesar de que me lo han explicado despacio, como se habla a los tontos y a los extranjeros perdidos que preguntan por una calle. No, no mires para otro lado Punset, que no tienes ni idea tú tampoco. Vamos a ver, la explicación que te dan es que a cada año le sobran cinco horas y pico y por ese motivo, cada cuatro años, nos encontramos con un día más. Bingo. Muy bien, hago como que me lo creo, que me cuesta, pero me surgen preguntas. ¿Dónde están las horas que sobran el primer año hasta que se van acumulando las de los otros dos para poder completar un día? ¿Dando vueltas por el cosmos? Según parece, si nos tragamos esta rueda de molino, el universo está desajustado, no es exacto. Y luego queremos tener en hora los relojes. Esto es un cuento, un complot más bien diría yo. El tiempo es relativo y por eso hay horas que se te pasan volando y minutos eternos. Nunca lo podremos controlar, y no es oro, es el río del que se pueden sacar las pepitas, pero hay que agacharse. Pasen buen día.