Davis y Gordon anulan el récord anotador de Gasol

Los New Orleans Pelicans dijeron adiós a una racha de ocho derrotas seguidas gracias al magnífico trabajo frente a Los Angeles Lakers (125-132) de Anthony Davis y Eric Gordon, que lograron minimizar el récord de anotación de Pau Gasol esta temporada.

Davis acabó el duelo con 28 puntos y 15 rebotes, en tanto que Gordon registró 28 tantos y 6 asistencias. Gasol, que sobrepasó a Joe Dumars y Jerry Stackhouse en la lista de anotadores históricos de la Liga y se coloca en el puesto 90, concluyó con 29 puntos y 12 rebotes.

Los Lakers no perdían en casa frente a los Pelicans desde enero 2009. El equipo, en el que Kobe Bryant, Steve Nash y Nick Young siguen de baja, no gana dos partidos consecutivos en el Staples Center desde noviembre. Los Pelicans, con las bajas de Ryan Anderson, Jrue Holiday y Jason Smith, no conocían la victoria desde el parón del Fin de Semana de las Estrellas.

Gasol se encargó de anotar los 13 primeros puntos de los Lakers y de cargar de faltas a Alexis Ajinça y Greg Stiemsma -2 cada uno en los primeros 7 minutos-. Sin embargo sus compañeros entraron en pista helados y no acompañaron el esfuerzo del español, provocando una desventaja de hasta 13 puntos en el primer cuarto (17-30) que llegó a ser de 19 en el segundo periodo (46-65).

A pesar de la mejoría local que llegó con la aparición de Xavier Henry y el regreso de Gasol tras unos minutos en el banquillo, los Pelicans se mostraban como una máquina perfectamente engrasada y cómodamente liderada por Davis, insaciable de cara al aro -aprovechando la diferencia de centímetros con Wesley Johnson- y muro infranqueable en su propia pintura.

La inexistente defensa de los de púrpura y oro y su escaso acierto desde el triple -su gran arma otras noches- facilitaron el trabajo a su rival, que vio cómo cuatro jugadores de su cinco inicial (Davis, Tyreke Evans, Eric Gordon y Austin Rivers) alcanzaban dobles dígitos en anotación al descanso.

El despertar de los Lakers

El equipo de Monty Williams llegó a estar 21 puntos arriba al comienzo del tercer periodo (55-76), momento en el que Gasol se arremangó y, poco a poco, fue ganando protagonismo de nuevo en ataque jugando muy cerca del aro, donde más cómodo se encuentra. Sus ocho puntos consecutivos motivaron al resto de los Lakers, especialmente a Kent Bazemore y Jordan Farmar, cuya labor llevó a los californianos a colocarse a 6 (85-91) poco antes de entrar en el último cuarto.

Allí los Lakers siguieron creciendo. Henry empezó a recordar al jugador de antes de la lesión y MarShon Brooks eligió buen momento para despertar (93-97), pero las distancias se mantuvieron en esos guarismos mientras los de D'Antoni parecían olvidarse del español en ataque. Se llegó con 124-128 a falta de 1:40 minuto tras un triple de Jodie Meeks, pero tanto Bazemore como Farmar erraron sendos lanzamientos exteriores. Un tiro libre de Gasol limó algo más la renta (125-128), aunque al final el gran acierto de Gordon desde el perímetro y la monstruosa presencia de Davis decidieron el duelo.