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Nuevo día de alerta en las playas gaditanas

La bandera roja se ha vuelto a izar hoy en el litoral gaditano debido a la fuerte corriente. Conil y Cádiz han acaparado el mayor número de incidencias

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Los servicios de Salvamento, Protección Civil, Cruz Roja y Policía Local de todos los municipios costeros del litoral gaditano tienen hoy activada la alerta máxima debido a que no se descarta que se repita el fenómeno que ayer provocó el rescate de más de un centenar de bañistas en diferentes playas gaditanas. Los socorristas han sacado hoy del agua a 33 personas, especialmente en Conil, donde se han producido 17 intervenciones, según han informado fuentes de Protección Civil -nueve en la playa de Los Bateles y ocho en el resto-, mientras que en Cádiz se han rescatado a doce personas, según han avanzado fuentes del Ayuntamiento. En uno de los casos se trataba de un padre con sus dos hijos mellizos de siete años, a los que les resultaba imposible salir del agua. Se ha producido en la playa de Cortadura, a la altura del restaurante Nahú y en el salvamento han intervenido dos agentes de Policía Local, que los han tranquilizado mientras esperaban a la zodiac de rescate. El resto de intervenciones se han repartido entre Chiclana y San Fernando con una y tres, respectivamente, tal como han informado fuentes de Protección Civil y la Cruz Roja.

Este mediodía se cerraban al baño las playas de Roche y Chipiona y se registraban más de una decena de rescates en Conil, uno de ellos múltiple de siete personas. En Chipiona, solo ha lucido la bandera roja la playa de Las Tres Piedras y también se ha prohibido el baño en El Palmar y Camposoto. En Rota, ondean también las banderas rojas en las playas de Nuevo Oasis, Peña del Águila y Pueblo Marinero.

Según las primeras hipótesis que se barajan, todo apunta que el fuerte mar de fondo que azotó Chipiona, Chiclana, Conil, El Palmar, Cádiz, entre otros lugares, se debió a una conjunción de factores que provocó que muchas personas fueran incapaces de salir del agua por sus propios medios. Estos factores fueron la pleamar, la morfología de las playas y las fuertes corrientes. Además de los rescates ya se han detectado algunos daños en el equipamiento de algunas de las zonas afectadas. Este ha sido el caso del acceso a la playa de Santa María de Cádiz que está cerrado debido a los daños en su escalera. Además operarios municipales han retirado las duchas por prevención.

La bandera amarilla luce en todas las zonas de baño de la capital a la vista de los partes meteorológicos y la situación en la que se encontraba el mar, según han informado fuentes del Ayuntamiento gaditano. Del mismo modo se han mantenido los avisos por megafonía para que se extreme la precaución con los pequeños, ya que persiste la resaca de marea que se experimentó en la jornada de ayer. Los diferentes servicios municipales implicados: Polícía Local, Protección Civil, Playas y Salvamento y Socorrismo se encuentran en alerta y están atendiendo las posibles situaciones de peligro. Durante la jornada de hoy se han realizado tres rescates, uno de ellos a la altura de Santibáñez y otros dos en Cortadura.

Mientras, en las playas de La Barrosa y Sancti Petri, en Chiclana de la Frontera, Protección Civil ha colocado bandera de nivel amarillo ya no se prevé subir el nivel de alerta. Los que apenas han sufrido los efectos del mar de fondo han sido las playas portuenses de La Puntilla, Santa Catalina, La Muralla y Vadelagrana, donde ondea la bandera verde, aunque se espera que pueda elevarse a amarilla cuando llegue la pleamar, prevista para las 19.30 horas.

Aunque el fenómeno que se registró ayer a partir de las cinco de la tarde se ha producido en otras ocasiones, el de este martes tuvo una especial repercusión debido al gran número de bañistas que a esas horas disfrutaban de una tranquila tarde de verano. Los servicios de emergencia insisten en que los usuarios tengan la máxima precaución posible debido a lo inesperado del riesgo. Los socorristas tuvieron que hacer un gran esfuerzo para poder atender a todos los bañistas. Incluso, en playas como la Barrosa se tuvo que incorporar personal que en ese momento no estaba trabajando.