fotolia

La actividad física y la cultura convergen en el Casco Histórico

Las rutas de patrimonio saludables convierten el entorno urbano en un gimnasio diferente

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Hace algo más de dos mil años, a Aristóteles se le ocurrió combinar la cultura (la filosofía, en concreto) con los paseos, y estableció lo que se conoce como la escuela peripátetica. Ahora, la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y el Consorcio de Toledo han desarrollado una propuesta similar: son las llamadas «Rutas patrimoniales saludables». Consisten en visitar distintos monumentos emblemáticos del Casco Histórico de Toledo a un ritmo «ágil», de manera que la actividad redunda en beneficios para el cuerpo y para el espíritu.

Aparte de la cultura que adquieren, los caminantes pueden bajar de peso y reducir su presión arterial, sus niveles de colesterol y el riesgo de padecer diabetes. Eso sí, no vale con hacerlo una vez, para notar sus beneficios es necesario hacerlas al menos una vez cada día (o, en su defecto, otros trayectos de distancia similar).

A lo largo de casi ocho meses, los profesores de la facultad de Ciencias del Deporte de la UCLM han estudiado una serie de propuestas con criterios como la velocidad y la hora del día, todo ello acompañados de medidores que permiten conocer de forma más o menos precisa la distancia recorrida, el desnivel acumulado y las calorías que se queman. En cuanto al ritmo adecuado, lo ideal es que sea moderado, de manera que permita hablar, pero con una cierta dificultad.

Este domingo a las 9.30 horas

Por el momento hay dos itinerarios diferentes, uno circular y otro lineal. Ambos parten de la iglesia de San Sebastián, y uno de ellos vuelve a ese lugar tras recorrer los alrededores de 23 edificios de la ciudad que han sido rehabilitados por el Consorcio (siete de ellos se pueden visitar; es el caso de la propia iglesia de San Sebastián, las Termas romanas, las Cuevas de Hércules, la plaza del Sofer, la Casa del Judío, la Tahona y el pozo del Salvador), mientras que el otro itinerario discurre hacia la zona arqueológica del cerro del Bú.

Las dos rutas son este domingo a las nueve y media de la mañana, y se repetirán cada media hora hasta las doce del mediodía, ya que los grupos son de un máximo de 30 personas. En caso de que la participación sea alta, han valorado la posibilidad de ampliar el horario media hora más.

Para participar, lo único que hace falta es llevar calzado cómodo, deportivo si puede ser, e hidratarse antes, durante y después de la actividad. Además, por supuesto, de ganas de contemplar la ciudad y su rico patrimonio desde otro punto de vista.

Ver los comentarios