El reto de estar preparados

Los artistas repiten hasta la náusea la frase de Picasso de que la inspiración debe pillarles trabajando. Son conscientes de que las oportunidades llegan cuando uno menos se las espera (o las musas, o las ocurrencias) pero es fundamental estar preparado para cogerlas por las solapas y no dejarlas escapar. En el caso del mercado laboral, de la industria, de las infraestructuras, sucede lo mismo. Cuando llegan las oportunidades hay que estar a punto para que éstas no se escapen.

En lo más duro de la crisis, numerosas voces clamaban por seguir preparando la provincia para cuando llegaran vientos más favorables. Empresarios, sindicatos y agentes sociales pedían inversión en infraestructuras y formación que permitiera a los gaditanos afrontar mejores tiempos con algo de posibilidades.

Y la provincia, inexistentes cursos de formación y ERES fraudulentos aparte, se adelantó con especialización y preparándose para cuando soplaran vientos mejores. La apuesta por la industria aeronáutica se ha revelado como más que acertada y el trabajar con seriedad y previsión ha facilitado que los últimos cambios que se han provocado en Airbus no hayan sido un trauma sino una oportunidad de demostrar a toda Europa las posibilidades de la industria gaditana.

Y es que la caída en las ventas de A380 parecía que podía suponer un problema; sin embargo, los buenos resultados cosechados en el A350 y el A320 Nero han facilitado un trasvase de trabajo desde el superavión a los otros dos modelos, menos caros y más atractivos para los nuevos compradores.

Este caso debiera servir de ejemplo para el resto de sectores económicos de una provincia tan necesitadas de impulsos económicos como Cádiz. Que las oportunidades en agricultura, turismo, gastronomía o nuevas tecnologías nos pillen con los deberes hechos y preparados. Porque la competencia es atroz y sólo el que esté preparado sobrevivirá.