El Apunte
Regreso a la escasez de agua
Los pantanos de la provincia aún no muestran datos alarmantes pero sus números sí que empiezan a ser preocupantes. Toca aplicar la prevención
Hay preocupación entre los responsables de los recursos hídricos de la provincia, pero la luz roja aún no se ha encendido en los despachos de la Cuenca Atlántica Andaluza. Hay margen para recuperar agua. El estado de los embalses de Cádiz ha decrecido notablemente en los últimos dos años hasta situarse, de media, al borde del 50%. Este registro es uno de los más bajos de la década. En 2013, por ejemplo, se encontraban al 80%. Sin embargo, la situación, según los propios técnicos, no es aún alarmante aunque, si no llueve en los próximos meses, todo puede empeorar. Los gestores han lanzado un mensaje de tranquilidad, pero, al mismo tiempo, de precaución, es decir, apelan al consumo responsable. Quizás sea el mejor momento para lavar conciencias y empezar a cuidar aún más un recurso del que dependemos, al igual quede la luz o el gas, ciegamente. El nivel de agua en los pantanos ha sido alto hasta hace dos años, muy lejos al de aquellos años 90 y primeros trimestres de los 2000, cuando la sequía afectó de manera notable a la provincia.
Pero de regreso al presente, el riesgo es alto y si el nuevo año hidrológico no varía con respecto a las últimas temporadas, la situación el próximo 2020 si que sería extrema. Entre los que mejor situación presentan se encuentran el de Arcos, pero los restantes muestran unos números que -sin caer en la alarma- deberían mover a la prudencia de todos. Estamos justo a la mitad de capacidad, medida en hectómetros cúbicos, de la que tiene la provincia: 1.821 en total.
El millón largo de habitantes puede llegar a consumir una media de 300 hectómetros al año. Durante la época estival, la media mensual se incrementa notablemente, sobre todo en zonas del litoral donde las poblaciones llegan a triplicarse. Atentos.
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