Y el mejor calzado para conducir es...

Para conducir, sobre todo en caso de viaje durante estos cálidos meses, hay que escoger ropa cómoda y ligera. Con el calzado pasa otro tanto: deber ser ligero, cómodo y flexible. Solo así contarás con buen tacto de pedales para pisarlos adecuadamente y no trabar tus propios movimientos sobre ellos o hacerte daño, más aún ante una emergencia. Además, el calzado correcto retarda el cansancio de los pies.

Toma nota: si vas a practicar una conducción deportiva, nada mejor que optar por un calzado muy ajustado, como los botines específicos, al estilo de los que utilizan los pilotos de competición. Aportan una suela más fina y gran sujeción, por lo que son los que mejores tacto y precisión consiguen sobre el pedalier.

Sin llegar a tanto, los mocasines, sobre todo los de verano, son muy cómodos y flexibles, con su fina suela. Son de los que menos cansan los músculos de pies y piernas, y también los que permiten adoptar una posición sobre los pedales más cómoda y relajada.

Con todo, valora que para afrontar largos kilometrajes uno de los mejores calzados que puedes utilizar son las zapatillas deportivas, en particular las destinadas a running, cómodas, de suela fina y flexible, con buen agarre y mejor precisión...

Para nada es aconsejable conducir con zapatos de tacón o con botas camperas. Éstas suelen tener tacón, lo que dificulta la conducción. Pasa igual con los zapatos de tacón: su punto de apoyo es el talón, que provoca una pisada inestable falta de precisión (mejor cambiarlos al conducir y volver a calzarlos cuando bajes del coche).

También son desaconsejables las chanclas de playa, no tan flexibles como se piensa, con mal tacto sobre los pedales (resbalan mucho) y el pie completamente suelto. Y las sandalias, mal las que no van atadas.