El casco para ciclistas no es ornamental

Según el ciclista profesional Eduardo Chozas, «la modernidad está en la evolución de la sociedad hacia un modelo de transporte urbano, ecológico y económico como lo es la bicicleta». Chozas ha expresado esta idea en la conferencia «Presente y futuro de una mejor movilidad en las ciudades con el uso de la bicicleta», organizada por la Fundación CEA.

En el acto, que contó con la asistencia de personalidades de la Dirección General de Tráfico (DGT) y de la Real Federación Española de Ciclismo, se discutió el presente de la movilidad de la bicicleta en ciudad y la contribución de la administración pública para mejorar las infraestructuras, teniendo en cuenta que a diario son 4 millones de usuarios los que utilizan la bicicleta en la urbe.

Entre las conclusiones figura que la mejora de infraestructuras debería estar enfocada a impulsar más km de carriles bici, que generarían aparcamientos en intercambiadores, mejorar el anillo verde de las ciudades para impulsar el ciclo–turismo o incluso favorecer que los trabajadores puedan llegar a las empresas en bici. Como ejemplo, ciudades como Sevilla y Barcelona, donde la movilidad ciclista está cada vez más extendida y, por ello, la urbe mejor acondicionada.

Falta cultura de bici

Para Chozas, «en España falta cultura de bici y es necesario concienciar a la ciudadanía implantando en la enseñanza materias sobre educación vial para que los niños la interpreten como medio de transporte. Cuando se haya conseguido ese grado de implicación, el uso de la bici se podrá igualar a ciudades europeas como Ámsterdam o Copenhage».

La obligatoriedad del seguro de responsabilidad civil para bicis y su matriculación ayudaría a que los ciclistas puedan estar identificados, y evitaría situaciones de fuga tras un atropello. Eduardo Chozas recordó que hay que hacer uso responsable de la bicicleta tanto al circular como al equiparse.

En este sentido, mencionó el uso del casco, que no aprueba como obligatorio pero del que señaló: «No es cuestión de estética y sí de seguridad; siempre que montó en bici lo llevo. Puede salvar vidas y evitar graves lesiones cervicales». Chozas también incidió en la necesidad de segregar los carriles bici del resto de la circulación rodada, algo que, advierte, «no pasa en ciudades como Madrid, pese al peligro que implica».

Bicicletas, cada vez más presente en nuestras vidas

En los hogares españoles hay más bicicletas que balones de fútbol. Esto explica los 600 millones de euros que facturó el sector en 2014.

Y es que cada vez son más los que usan la bici como actividad lúdica, transporte o profesionalmente. Un hábito que, sea cual sea su tipología, mejora la salud previniendo cada año 100.000 infartos.

La bici, como medio de transporte, ahorra en combustible una media de 100 euros al mes que al año vienen a ser 1.200 euros. También economiza tiempo, alrededor de 220 horas por año frente al uso de metro, autobús o coche. Y, medioambiental, reduce las emisiones de CO2 y contribuye a la fluidez del tráfico.

Todo esto «supone un reto, donde todas las ciudades tienen que avanzar para ceder espacio a la bicicleta, pues el futuro de la movilidad en la ciudad es la bici eléctrica», según Chozas.