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Citroën C3: estilo propio para el pequeño urbano

La cuarta generación del modelo adopta el código estético iniciado por el C4 Cactus

BARCELONA Actualizado: Guardar
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Dar el relevo al coche más vendido de la marca en todo el mundo es un reto muy importante. Un dato sirve para dar muestra de lo que significa el C3 para Citroën: desde el inicio de la vida comercial de la segunda generación del modelo, en el año 2012, se han vendido más de 3.500.000 unidades. Es por lo tanto un coche popular, que coincide plenamente con el carácter de la marca.

Para la tercera generación, presentada a nivel internacional esta semana en los alrededores de Barcelona, y que ya se puede reservar en los concesionarios, Citroën ha apostado por los códigos estilísticos del C4 Cactus, que tanto éxito ha cosechado.

Esto significa que se abandona el aire de semi monovolumen con unas nuevas señas de identidad marcadas por la posibilidad de personalizar el vehículo al máximo.

Se puede hacer mediante una muy completa gama cromática, con 9 colores para la carrocería que se pueden combinar con tres tonalidades diferentes para el techo. Además, se podrán elegir los espejos retrovisores, los embellecedores de los antiniebla e incluso detalles de los Airbump, opcionales. Si a esto sumamos las versiones monotono, hacen un total de 36 combinaciones diferentes.

Mucho color

Es por lo tanto un coche "colorido", al igual que Barcelona, la ciudad donde hemos podido probar dos de las motorizaciones con las que contará el pequeño C3: un gasolina Puretech de 82 CV y cambio manual de 5 velocidades, y la variante más potente, también gasolina pero con 110 CV y cambio automático EAT6.

En ambos casos se trata de dos vehículos que responden de forma muy correcta a las expectativas que se puedan tener respecto a un coche de estas características. Incluso el menos potente de los dos se ha movido con soltura por las reviradas carreteras del entorno de San Sadurní de Noya. A la hora de pisar a fondo el acelerador al pasar por un repecho, el motor de tres cilindros ruge, pero el buen trabajo realizado en cuando a la insonorización del motor logra que el vehículo avance sin que los pasajeros lleguen a notar ningún tipo de molestia sonora.

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La motorización se completa con una mecánica más en gasolina, con tan solo 68 CV, y dos diésel Blue Hdi de 75 y 100 CV. Todos ellos con consumos muy reducidos, que parten de los 3,5 l/100 km.

Exteriormente y comparado con el anterior modelo, el nuevo C3 mide 3,99 metros de largo (5 cm más) por 1,75 de ancho (2 cm más) y 1,47 de alto. Incluso en las plazas posteriores un adulto puede acomodarse sin problemas, sin tocar con el techo y con suficiente espacio para las rodillas.

El maletero, con 300 litros, se mantiene con una estupenda cifra respecto a sus rivales en el mismo segmento.

Hay tres niveles de equipamiento : Live, Feel y Shine. Todos incluyen de serie elementos como la alerta por cambio involuntario de carril, programador de velocidad y reconocimiento de señales de tráfico. Pero uno de los elementos más novedosos es la "Citroën ConnectedCam", situada en el retrovisor con la que se pueden realizar fotografías y vídeos y descargarlos en el teléfono móvil. Tiene además una función que en caso de accidente memoriza automáticamente los 30 segundos previos y los 60 segundos posteriores al mismo.

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