Leo Baptistao dibuja el triunfo europeo

Salió veloz y voraz Leo Baptistao desde más de cincuenta metros rumbo al área del Viktoria. Arranque potente, fiero, con criterio para avanzar con el cuero, salvando a un par de rivales, sin encontrar opción de asistir a Soldado. Leo siguió y en un chasquido se metió en el área. Se escoraba hacia su izquierda. Y pensó que ya que estaba ahí y después de la carrera lo suyo era finalizar. Ajustado al palo derecho de Kozacik y al interior de la red. Baptistao daba ventaja, y a la postre el gol del triunfo del líder de la Liga, y desactivaba a un conjunto checo que llegó a atosigar a los españoles. Sumó de tres en la segunda jornada de la Liga de Europa, ampliando el buen momento.

Marcelino García practicó algunos retoques en su once. Con el Levante a la vuelta de la esquina para intentar seguir agarrando el liderato de Primera, no podía descuidarse y revolucionar el once ante el conjunto checo. El Villareal cayó derrotado en la primera jornada de su grupo frente al Rapid de Viena. No rebuscó el técnico demasiado entre el fondo de armario, que es bueno. Y dibujó una primera media hora de encuentro ante el Viktoria veloz, profundizando por los costados, provocando acciones de peligro. Pero le faltó eficacia. Leo Baptistao, al que Kozacik repelió su chut, y Soldado, de cabeza mandó el balón fuera por muy poco, tuvieron dos claras ocasiones para que los castellonenses tomasen ventaja.

Lo eléctrico del juego del Villarreal, sin embargo, fue perdiendo fuerza. Kopic, una pieza clave para los checos en las acciones de estrategia a balón parado, perdió por el camino un pieza comercial. Se le desprendió la publicidad del patrocinador principal del Viktoria. Anecdótico. Pero en los tiempos que corren y con la importancia de las marcas comerciales, más aún cuando aparecen en el escaparate continental, ese negociado no descendía tanto a lo curioso.

Lo puramente deportivo, el fútbol, en todo caso, es lo que vale realmente sobre el césped. Y el Viktoria logró apagar a los castellonenses, que se vieron atosigados en jugadas a balón parado y llegadas por las bandas de los checos.

Carrera potente

El equipo de Karel Krejcí mantuvo esa intensidad en la reanudación. Muy plomizo el Villarreal. Pero apareció Leo Baptistao, muy fino en este arranque de temporada, quien recibió un balón en su sector del campo a poco de la medular, tiró una carrera lanzada y decidida, salvó a un par de rivales y escorándose a su izquierda remató para conseguir un gol brillante ajustado al palo.

Fue un martillazo para los checos. Sirvió a los de Marcelino para reencontrarse y volver a gobernar el balón e hilvanar su fútbol mezcla de combinaciones y salidas rápidas. Mejor se le puso el negociado a locales a diez minutos del final. Prochazka vio dos amarillas en seis minutos y dejó al Viktoria con un futbolista menos. El Villarreal aguantó un triunfo para reengancharse.