La ministra de Interior británica dice que algunos refugiados se merecen asilo más que otros

La ministra del Interior británica, Theresa May, ha declarado su intención de cambiar la definición internacional para los refugiados. Según la política de Reino Unido, la actual nomenclatura con la que se reconoce a los solicitantes de asilo no se ajusta a la realidad, ya que su connotación en plural se asocia con un grupo e impide que se les identifique como personas individuales.

Según estas declaraciones, recogidas por el medio «Independent», «no todos los refugiados son iguales», sino que algunos merecen asilo más que otros, y por eso la ministra pide un término más específico que determine la condición de cada uno.

«A largo plazo, quiero trabajar con otros países de Europa y de la ONU para revisar las definiciones jurídicas internacionales de asilo y refugio», ha asegurado May.

Según la ministra del Interior de Reino Unido, «hay una gran diferencia entre una familia de jóvenes sirios que huyen de la tiranía de Al Assad y Estado Islámico, y un estudiante que solicita asilo una vez que se ha quedado sin crédito en la tarjeta bancaria, o una sobre criminales extranjeros que piden que se les envíe a una prisión en su propio país».

Y en esta línea, la política británica miembro del partido conservador, ha matizado: «Al adoptar un enfoque más duro para aquellos que no necesitan nuestra ayuda, podemos dar más apoyo a las personas vulnerables que están en necesidad real y urgente de nuestra protección».

El Gobierno británico vuelve a adentrarse en un terreno fangoso, pues ya se han tenido que lidiar con críticas de algunos grupos de derechos humanos ante su negativa a desempeñar un papel importante en la aceptación de refugiados desplazados por la actual guerra civil siria.

Un derecho, no una obligación

El director ejecutivo del Consejo de Refugiados, Maurice Wren, no ha tardado en reaccionar ante las palabras de la política tory. Para él, «la postura de la ministra del Interior de cerrar la frontera de Reino Unido a los refugiados que huyen de sus vidas es totalmente escalofriante, como también lo es su ataque contra el principio fundamental consagrado en el derecho internacional de que las personas que huyen de la persecución deben ser capaces de solicitar asilo en Reino Unido».

En esa misma línea ha continuado Wren, que sostiene que «la idea de la ministra del Interior de que los pocos refugiados que llegan a las costas de Reino Unido por sus propios medios no necesitan protección es fundamentalmente falsa y defectuosa. Convertirse en un refugiado no es solo el privilegio de los pobres o enfermos».

«A todo el mundo le gustaría ver que el número de solicitudes de asilo en Gran Bretaña baja, pero solo porque si eso significase que el mundo se ha convertido en un lugar más pacífico, más seguro. En su forma actual, las ambiciones de Theresa May están simplemente fuera de sintonía con la realidad: el mundo se enfrenta a una de las peores crisis de refugiados que hemos visto nunca. El sistema global de protección de los refugiados está basado en el principio de que toda persona tiene derecho a solicitar asilo», ha zanjado el director ejecutivo del Consejo de Refugiados, indignado ante la actitud de la política conservadora británica.