Las generosidad de los británicos hacia los refugiados pone en evidencia a Cameron

El Reino Unido es uno de los países que están exentos de acoger refugiados debido al tratado que tiene suscrito con la Unión Europea ( no pertenece al espacio Schengen). Sin embargo, tras las presiones, el Gobierno Británico aceptó hace unos días acoger 20.000 asilados durante los próximos cinco años. No ha entrado sin embargo en el reparto de los 120.000 refugiados, cuyas cuotas han sido aprobadas finalmente esta semana, con el rechazo de cuatro países: Hungría, República Checa, Eslovaquia y Rumanía. Para muchos la actitud del Ejecutivo de Cameron deja mucho que desear y debería mostrar un mayor compromiso en esta crisis.

Esta actitud parece no ser compartida por los británicos. Según un informe al que ha tenido acceso el diario «The Independent», la respuesta de estos ante la crisis de refugiados de Siria que se cierne sobre el Oriente Próximo y Europa, ha sido muy generosa.

Varios millones de ciudadanos han ofrecido tiempo, dinero y sus propias casas para ayudar. Una reacción que ha puesto en evidencia y está presionando al Gobierno de Cameron.

Las nuevas cifras dadas a conocer por la Charities Aid Foundation (CAF) desevelan que varios millones de personas han contribuido de alguna manera para socorrer a los refugiados.

Uno de cada tres donantes de dinero o que ofrecen su tiempo confesaron que decidieron actuar después de la publicación del niño sirio de tres años, Aylan Kurdi, arrastrado a una playa en Turquía.

Instituciones benéficas, políticos y voluntarios han calificado de «increíble» la respuesta de los británicos ante la crisis de los refugiados. Y se han unido para hacer un llamamiento al Gobierno de Cameron para que sus medidas vayan más allá.

Jeremy Corbyn, el nuevo enfant terrible de la política británica y líder de los laboristas, criticó la respuesta «totalmente inadecuada» de Cameron a la crisis de los refugiados, refiriéndose a la ausencia del Reino Unido en el reparto de cuotas de esta semana. Algo que permitiría «aliviar la carga que pesa sobre países más pobres» que están luchando para hacer frente a la crisis.

En declaraciones a The Independent: «Los refugiados son bienvenidos, y el pueblo británico una vez más ha demostrado su humanidad, que no ha sido tristemente reflejada por nuestro Gobierno».

Según una encuesta de la CAF, casi uno de cada tres adultos del Reino Unido habían empezado a aportar algún tipo de ayuda para los refugiados en el último mes. Uno de cada 10 dijeron que habían donado cosas a los necesitados, mientras que el 12% donó dinero. Una de cada 14 personas -el equivalente a casi dos millones de hogares del Reino Unido- dijeron que estarían dispuestos a ofrecer una habitación o espacio en su casa para un refugiado.

Mientras millones de libras han sido donados en efectivo, la generosidad de pueblo británico ha evidenciado los esfuerzos de los grupos de voluntarios que trabajan sobre el terreno.

Hannah Howard, de 31 años, co-fundador de Calais Compassion, dijo que ella y un grupo de amigos se habián decidido a tomar medidas porque «los poderes fácticos, que podría hacer algo, no lo estaban haciendo». Y confiesa su sorpresa ante los donativos realizados por los británicos «de todas las clases sociales». «La bondad, la compasión y la solidaridad que hemos visto en estos días ha sido absolutamente impresionante».

Yvette Cooper, presidenta del grupo de trabajo sobre refugiados el partido Laborista, dijo que no había «ninguna duda» de que la presión de los ciudadanos ha obligado a David Cameron a cambiar su posición comprometiéndose a acoger a 4.000 refugiados al año.

«[El Gobierno] ahora debe ir mucho más allá, trabajando con las comunidades locales y el gobierno local para acoger muchos más asilados en las próximas semanas».

«A lo largo de la historia, el pueblo británico ha demostrado una y otra vez su voluntad de acoger y proteger a las personas que huyen del conflicto y la persecución», añade Anna Musgrave, del Consejo de Refugiados. «Ahora tenemos que ver esta misma generosidad de espíritu por parte del Gobierno británico. Los británicos quieren dejar constancia de que están poniendo su granito de arena para ayudar a los refugiados que llegan a las costas de Europa: le toca al Ejecutivo asegurarse de que eso ocurra. Nunca es demasiado tarde para que el Gobierno haga lo correcto».