El presupuesto de la Diputación de Lugo, en manos del PP y el díscolo Martínez

Los presupuestos de la Diputación de Lugo podrían no salir adelante, extremo que obligaría al actual gobierno provincial a prorrogar los actuales. Las diferencias manifiestas con el grupo de los populares gallegos y el diputado expulsado del PSOE y alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, complican la posibilidad de llegar a un acuerdo, puesto que en sus manos está la aprobación de las cuentas tal y como están diseñadas por el bipartito lugués. En este sentido, el titular socialista de la institución provincial, Darío Campos, realizaba este viernes un llamiento a la responsabilidad del PP bajo la advertencia de que la provincia no puede paralizar las inversiones pendientes.

En este escenario, Campos no descarta que los grupos de la oposición entren en razón y apoyen unas cuentas que, según defendió, «son generosas y buenas para la provincia, con una inversión importante para Lugo».

En este sentido, no sin antes matizar que los miembros del bipartito no quieren desviarse «mucho de su planteamiento inicial», se mostró dispuesto a aceptar alguna «pequeña modificación» en su propuesta.

El gobierno de socialistas y nacionalistas, con diez y dos diputados respectivamente, depende del voto del grupo popular, mayoritario con doce, y del no adscrito, Manuel Martínez, que ya anunció que para respaldar las cuentas se tiene que comprometer una inversión de cinco millones de euros en el concello de Becerreá para un geriátrico.