La Zona Franca lleva a Barcelona la semana de la nueva economía

El Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) se ha propuesto reinventar la promoción económica con la organización de un acontecimiento híbrido internacional, que mezclará la presencia física en Barcelona, en algunos de sus más emblemáticos edificios, con la telepresencia virtual. Todo ello envuelto de «sensaciones» transgresoras, de intercambio de conocimiento, talento y un village de presentaciones de productos y servicios que no requerirá de estands a la usanza ferial clásica, puesto que se utilizarán, por ejemplo, hologramas, vídeos y proyecciones en distintos puntos de la ciudad. La Barcelona New Economy Week (BNEW) tiene carácter profesional y la organización ofrece a los participantes, tanto presenciales como virtuales, unas agendas de contactos sectoriales para que generen oportunidades de negocio.

La pandemia ha obligado a aplazar hasta el año que viene el Salón Internacional de la Logística (SIL), el SIL de las Américas y el eDelivery, pero Pere Navarro, delegado especial del Gobieno en el Consorcio, y Blanca Sorigué, directora general de esta institución pública de promoción económica, han inventado, literalmente, un acontecimiento que agrupa en cuatro días un total de cinco mundos económicos, de la logística al inmobiliario, pasando por el comercio electrónico, la industria digital y las zonas económicas. Un repóker de eventos en el que participarán directivos y empresarios de todo el planeta, preferentemente de Europa, África y el continente Americano.

Aunque del 6 al 9 de octubre se espera que se haya recuperado mucha movilidad, el CZFB baraja que la mayoría de los visitantes presenciales sean españoles, pero prevén hasta un total de 10.000 participantes internacionales virtuales. Poder participar a distancia en la semana de la nueva economía ciesta 100 euros y el pack para asistir presencialmente a los cinco eventos asciende a 600 euros.

Los debates, conferencias, entrevistas y reuniones B2B (entre empresarios) serán posibles gracias a un despliegue tecnológico sin parangón, según los organizadores. Todos los eventos se celebrarán en espacios abiertos, diáfanos, libres de Covid-19, digitales y comprometidos con la Agenda 2030.

Pere Navarro avanzó que el BNEW «apostará por las posibilidades del cambio de paradigma económico que ofrecen las nuevas tecnologías», hasta el punto de convertir a Barcelona, en octubre, en «la capital mundial de la nueva economía» . El objetivo no es otro que «ayudar a reactivar la economía del territorio y a su tejido empresarial, además de ofrecer una gran oferta de valor a los principales sectores económicos, crear oportunidades y sinergias entre los sectores de la logística, el inmobiliario, el ecommerce, la industria digital y las zonas económicas, acelerar la innovación y apoyar el talento».

La propuesta de conocimiento de BNEW se basa en unos pódiums que permitirán a todos los participantes ampliar conocimientos, resolver dudas, anticiparse al futuro y retroalimentarse de las opiniones de 350 expertos en un formato «sin precedentes, ágil e innovador» . La guinda para los negocios la proporcionará las relaciones o networking, pues permitirá acceder a una amplia agenda de contactos, programar reuniones presenciales y conseguir contactos digitales de cualquier lugar del mundo.