Inmobiliario

Los mejores trucos para negociar el precio de una vivienda en Sevilla

La capital hispalense es la tercera más cara de Andalucía, con un precio medio por metro cuadrado de 2.004 euros en febrero

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Solo en el mes de enero se vendieron en el conjunto de Andalucía un total de 10.695 viviendas, un 35,9 % más que el mismo mes del año anterior. La estadística registral inmobiliaria va un paso más allá y señala que, durante el cuarto trimestre del año 2021, el peso de las operaciones en la capital hispalense supuso el 33,26 % del total de las realizadas en la provincia.

Los datos avalan la buena salud del mercado inmobiliario sevillano, que terminó febrero como la tercera capital más cara de la comunidad. Con un precio medio por metro cuadrado de 2.004 euros , solo Cádiz (2.499 €/m²) y Málaga (2.529 €/m²) superaron los registros de la ciudad hispalense que, por otro lado, anotó un crecimiento interanual del 1,58 %. Algo más contenido fue el aumento en el conjunto de la provincia. Según los datos del último informe mensual de precios de pisos.com , el conjunto del territorio sevillano cerró el pasado mes con un precio medio de 1.403 €/m² para la vivienda de segunda mano.

Aunque los precios pueden variar notablemente de una a otra zona de la ciudad, en una misma ubicación y teniendo unas características similares, no deberían existir grandes diferencias. Si es así, este podría ser un indicador que te invite a pensar que tienes margen de maniobra para negociar el precio de la vivienda en cuestión . Pero para que la compra de un piso en Sevilla termine con éxito, no solo debes analizar el mercado. Desde pisos.com hemos identificado algunos trucos que pueden ayudarte con tu propósito de conseguir una rebaja en el precio de tu casa ideal.

Estudia el mercado

Puede que tus pretensiones pasen por pagar una determinada cantidad por la casa de tus sueños, pero de poco servirá que te marques unos límites si no has estudiado el mercado. Lo primero que debes hacer es ser realista con tu capacidad financiera y, a partir de ahí, analizar la situación inmobiliaria de la zona para conocer la salud del mercado.

El barrio, el acceso a los servicios o el tipo de vecinos son solo algunos factores que pueden influir en el precio y que, llegado el momento, pueden convertirse en un arma con la que negociar el precio de tu vivienda .

Saca partido a las carencias del inmueble

Las viviendas de obra nueva dejan poco margen de negociación, pero si estás pensando en comprar una casa de segunda mano , las propias características del inmueble son una herramienta clave en toda negociación. Al igual que los metros cuadrados, la orientación, la altura o ciertos extras —tales como zonas comunes, garajes o trasteros— pueden incrementar el precio, otros aspectos como el estado de conservación, la necesidad de reformas —fontanería, electricidad, calefacción…— o la propia eficiencia energética de la propiedad pueden ser claves para negociar a la baja.

Investiga la situación del inmueble y el vendedor

No es ningún secreto que la información es poder y a la hora de negociar el precio de una vivienda no lo es menos. Cuantos más datos conozcas de la propiedad y el vendedor, más fácil te resultará plantear una negociación favorable.

El hecho de que una casa lleve mucho tiempo a la venta puede jugar a tu favor. En este sentido, dilatar el proceso de venta suele traducirse en una pérdida del interés por parte de los potenciales compradores y un aumento de la urgencia por parte de los vendedores lo que, en la práctica, te situará en una posición de cierta ventaja.

Demuestra interés y solvencia

Que no surjan imprevistos que compliquen la operación de compraventa es uno de los deseos de todo propietario, algo que puede convertirse en un punto a tu favor. Mostrar tu interés —sin excederte en la efusividad— así como tu solvencia económica puede ayudarte a crear una relación de confianza con el vendedor que facilite la negociación. De hecho, contar con una hipoteca preconcedida o disponer del dinero para comprar una vivienda al contado suele dar puntos.

En cualquier caso, si tienes un interés real en la propiedad, huye de las ofertas ridículas. Sé realista con tus posibilidades y la situación del mercado y plantea un precio razonable para ambas partes . Puede que tu primera propuesta no convenza al vendedor, pero tal vez llegue una contraoferta que acerque vuestras posiciones. Escucha, sé paciente y, si no hay acuerdo, sigue buscando.

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