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Los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez (i) e Ignacio Fernández Toxo, respectivamente, encabezan la manifestación de Madrid con la que se cierran tres jornadas de movilizaciones en todo el país bajo el lema "Las personas y sus derechos, lo primero" - EFE

UGT y CC.OO. dicen que seguirán movilizándose pese al fracaso de ayer

Treinta mil personas, según los convocantes, o 4.000, según la Policía pidieron recuperar los derechos perdidos

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Ni siquiera la jornada soleada que hubo ayer en Madrid animó a los ciudadanos a acudir de forma masiva a la convocatoria realizada por Comisiones Obreras y UGT por más y mejor empleo así como por la recuperación de los derechos laborales que se perdieron, según ellos, con la reforma laboral.

Ambas centrales sindicales, que cifraron en 30.000 los asistentes aunque la Delegación del Gobierno la rebajó a 4.000, adviertieron al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que continuarán con las movilizaciones por la recuperación de derechos laborales si no se aviene a negociar.

Hay que recordar que el pasado 24 de noviembre hubo una reunión formal entre el presidente del Gobierno, representantes de la CEOE y de los dos principales sindicatos en la que se acordó abrir una negociación para mejorar las condiciones de los trabajadores aunque, lógicamente, no se llegó a acuerdo alguno ya que se trató de la primera toma de contacto desde que empezó la legislatura.

El líder de UGT, Pepe Álvarez, y el de Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, explicaron que la manifestación de ayer fue el colofón a una tanda de movilizaciones que se celebraron la semana pasada en toda España para presionar al Gobierno y exigir mejores pensiones, salarios dignos y más calidad en el empleo. Su tesis es que el diálogo social que ofrece Rajoy excluye las reivindicaciones salariales.

Álvarez fue más allá y aseguró que las manifestaciones y movilizaciones son una advertencia también a los empresarios, en el sentido de que "las tienen que tener más en cuenta en lugar de pensar en engordar más y más sus arcas". El líder de UGT le dijo a la patronal que hay que repartir la riqueza y hay que ir a un proceso de negociación colectiva con aumento real de salarios, al tiempo que le recordó al PP que la mayoría de los ciudadanos quiere cambios. Ambos líderes sindicales pidieron una política económica que revierta los beneficios en los españoles y una reforma fiscal a fondo que acabe con el fraude.

El líder de Comisiones Obreras, Fernández Toxo, recordó que la manifestación se ha celebrado en un momento clave ya que se está decidiendo la política presupuestaria de 2017.

La manifestación contó con numerosa presencia de líderes políticos de izquierda. En concreto, al inicio de la marcha, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, mostró su apoyo a los manifestantes porque "quienes recortan están cuestionando las bases de la democracia" mientras que el líder de IU, Alberto Garzón, valoró las movilizaciones "por lo que suponen de recuperación de derechos robados". Desde el PSOE, el portavoz de la gestora, Mario Jiménez, quiso también apoyar con su presencia las reivindicaciones e instó a los partidos políticos a aprovechar la minoría parlamentaria del Gobierno para revertir la reforma laboral. A la marcha se sumaron trabajadores de Coca-Cola, representantes del colectivo de limpiadoras de hotel y de los centros de atención al cliente de Telefónica, entre otros.

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