Michael Robinson y el Cádiz CF, un binomio presente en 'Good, better, best'

Antonio Valimaña

01/11/2020 a las 18:06h.

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La vida de Michael Robinson fue hace unos días la protagonista en la emisión del último 'Informe Robinson' de la historia. Un capítulo inolvidable que se puede ver en 'Vamos' de 'Movistar +'.

Este especial sobre su creador no ha dejado a nadie indiferente. Bajo el título 'Good, better, best' se pudo seguir la evolución del que acaba de ser elegido, a título póstumo, el mejor presentador en los Premios Onda. Otro reconocimiento más para 'Robin', quien falleció el pasado 28 de abril tras no poder superar una larga y dura enfermedad.

Fue en sus últimos días, cuando era consciente de su final, cuando Michael Robinson fue entrevistado. En primera persona ponía voz a una trayectoria en la que se cuenta cómo fue su infancia, sus inicios balompédicos y su llegada con un contrato notorio al Manchester City en el año 1979. Todo ello sin olvidar su paso triunfal por el Liverpool, el club de sus amores y con el que se proclamó campeón de Europa.

Así hasta su llegada a España de la mano de Osasuna. «El fútbol me robó la universidad. Mi trueque fue: yo pongo en la mesa fútbol, tú me pones España».

Fue el inicio de un idilio con nuestro país que continuó con sus inicios en Canal+ en 'El día después' y su conversión en mito de la comunicación. Por último, su trágico final, pocos días después de narrar su última cita en Anfield Road durante la Liga de Campeones (casualidades del destino), contado por él mismo antes de fallecer en una tremenda entrevista que sus compañeros presentan de la siguiente forma: «Michael estuvo especialmente lúcido en la última entrevista. Nos ha dejado una cantidad de reflexiones vitales sobre la vida en suma. Yo creo que vamos a aprender de la vida de Michael y de su filosofía de vida».

Pero si algo no podía faltar era el vínculo emocional de Michael Robinson con Cádiz y el Cádiz CF. 'Robin' lo dejaba claro: «No sabía que un lugar como Cádiz podía existir. No obedecía a ningún canon del siglo XXI» , apuntaba. Y añadía: «En Cádiz hay algo que no sabemos los demás».

Ser Baltasar en la Cabalgata de Reyes Magos y pregonar el Trofeo Carranza (su hijo Liam recogió su testigo este pasado verano) fueron algunos de los momentos que jamás olvidó. Y es que Michael Robinson era un cadista y gaditano más, aunque nunca defendiese esa zamarra sobre el rectángulo de juego.

En este sentido, Pepe Mata, gerente de la Fundación Cádiz CF, destacaba: «Michael ha salido mucho en el mundo del Carnaval. Era una persona muy querida, tremendamente querida». Y apostillaba: «Ha sido Rey Mago, Hijo Adoptivo de la ciudad de Cádiz. Lo que él le daba a Cádiz en imagen no está pagado».

También habló Miguel Cuesta, quien recordó: «Tú tienes que ser algo del Cádiz CF. Consejero del Cádiz CF. Fue proponerlo y por unanimidad absoluta todo el mundo coincidía en que era una persona que nos iba a ayudar mucho, como así fue».

Y apuntó: «Él decía que sus raíces eran gaditanas y se quedaba tan tranquilo. Se sentía más español que inglés». Al tiempo que comentó: «La alegría que transmitió Michael en todo fue notoria. Cada consejo suyo era un espectáculo. Dio clases maestras de lo que es el mundo del fútbol».

Y es que el periodista británico Jhon Carlin dejó claro que «Michael Robinson es el inglés más querido en la historia de España».

Alfredo Relaño, por su parte, puntualizó: «Michael se inventó que descendía de náufragos de la Invencible».

Durante este emotivo documental no pudieron faltar las imágenes de alegría y emoción de Michael Robinson durante los ascensos del Cádiz CF a Segunda en el Juan Guedes de Las Palmas (2003) y a Primera en Chapín dos años después.

A Josep Pedrerol y Joaquín Ramos Marcos les dijo: «El fútbol no me daba las sensaciones cuando jugaba que me da ahora viéndolo desde otra parte, con mi equipo». Y recalcó sobre la gesta en Chapín: «Me puse muy religioso en ese momento. Yo creo que no existe ninguna palabra que signifique qué es ser cadista».

A fin de cuentas, tal y como Michael apuntó: «Pienso que soy también parte de España. Su Robin, su Michael, su inglés. Soy feliz gracias a España. No me acostumbro al placer de ver cómo España nos ha dejado invadir sus vidas».

‘Michael Robinson: Good, better, best’, o como él mismo dijo en español: «Bueno, mejor, lo mejor. No descansaré hasta que mi bueno sea mejor y mi mejor sea el mejor de todos». Eterno.

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