TIENES UN CORREO

Hace unos meses descubrí otro de los aspectos por los que no vamos a salir de la crisis en, mínimo, una generación. Sí, ya sé que no es el momento de mostrarse abiertamente pesimista que se contagia pero es que.

Estando en Polonia en una reunión de profesorado, una amable nativa me dio su correo para intercambiar fotos del encuentro e impresiones varias. Cuál fue mi sorpresa al observar que era Karyatide1971@nosequé.com. En mi parco inglés le pregunté: «¿Cariátide, columna, humana, forma?», «of course», respondió. ¡Qué maravilla! Entonces me acordé de cuando le propuse a mi alumnado que hiciéramos un grupo en internet para enviarnos tareas, trabajos y demás información. Tras su aceptación, procedieron a dejarme sus correos electrónicos: gitanojeré2020@, kaxondokayo@, gitanawena@, zumbaojere@, y así hasta un sinfín de insensateces solo igualada por los homónimos de la otra ciudad, kadiweno2099@, laxonixula434@, kannavakai@ cadistastalamuerte@, etc. Esto es lo que hay, tampoco se puede pedir mucho más de quienes creen que Lorca es una ballena asesina, Titanic la grabaron allí mismo o Alberti es un delantero de la Juve. Ellos son así, quieren reflejar en sus correos lo que sienten, sus inquietudes y, sobre todo, su simpleza. Dejaremos el tiempo pasar que, al fin y al cabo, es el único capaz de poner a cada uno en su sitio, y, mientras tanto, para recibir mensajes e integrarme en el grupo como uno más me he sacado un correíto nuevo, ercarvovasilon@...