El PP pide «formalmente» la dimisión de Chaves y Griñán por los ERE

Manuel Chaves contestó ayer a los diputados populares que considera «intolerable» que reclamen su dimisión y que pretendan dar al resto de la cámara «lecciones de honorabilidad» política cuando llevan en sus listas a un imputado por cohecho, el presidente valenciano, Francisco Camps.

El vicepresidente tercero del Ejecutivo salió así al paso del ataque coordinado del PP, que por tres veces durante la sesión de control en el Congreso y por cuarta vez en la rueda de prensa posterior que dio su portavoz, Esteban González Pons, reclamó «formalmente» su dimisión y la de su sucesor en la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, por considerar que «conocieron» y «taparon» durante años el fraude de los ERE descubierto en esta comunidad autónoma.

El diputado Rafael Merino acusó a ambos de «haber montado un régimen de corrupción generalizado en Andalucía» y su colega Juan José Matarí, de «manejar fraudulentamente 647 millones de euros y de regalar pensiones a muchos familiares socialistas». El también popular Ricardo Tarno, en la misma línea que sus predecesores, reclamó a Chaves que «tiene que irse porque es el responsable máximo» del escándalo.

Chaves volvió a negar cualquier conocimiento del uso fraudulento de los fondos públicos destinados a estos ERE y también que se haya detectado «fraude generalizado alguno», ya que de los 25.000 trabajadores beneficiados por este tipo de ayudas hasta el momento sólo se han detectado 70 casos irregulares. De igual modo, recordó a los populares que fue la propia Junta andaluza quien puso en conocimiento de la Fiscalía los posibles hechos delictivos cuando tuvo conocimiento de ellos y que el PSOE ya ha adelantado que expulsará de inmediato a cualquier militante que pueda estar implicado. Hasta ahora ha expulsado a ocho 'intrusos' y al ex director de Empleo, Javier Guerrero, y al ex delegado de Empleo en Sevilla, Antonio Rivas.

En los tribunales

El vicepresidente tercero contestó que las acusaciones que le dirigen son «calumnias, mentiras y difamaciones» y retó a los populares, a quienes bautizó como «campeones del cinismo», a denunciarle ante los tribunales si tan seguros están de lo que afirman. En el mismo sentido se pronució el presidente andaluz, José Antonio Griñán, quien advirtió ayer al presidente del PP-A, Javier Arenas, de una querella si le acusa de un delito en relación a los ERE. «En política podemos hablar siempre de responsabilidades políticas, en ese sentido lo que quiera, pero de atribuciones de figuras delictivas será en los tribunales», aseveró. Arenas manifestó el martes que Griñán «supo, tapó y siguió autorizando lo que pasaba» sobre los ERE.

El PSOE volvió ayer a impedir una comisión de investigación en el Parlamento sobre las ayudas al empleo solicitada por el PP y respaldada por IU, en este caso sobre las subvenciones con fondos europeos a las empresas, cuyas irregularidades investiga la Fiscalía del TSJA. Hasta el momento se sabe que hay empresas investigadas ent odas las provincias salvo Huelva.