«Ahora somos el objetivo»

El juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, ha tomado hoy declaración durante media hora a la cooperante madrileña Ainhoa Fernández, secuestrada en los campamentos de Tinduf en octubre de 2011 y que permaneció nueve meses en cautiverio en Malí junto al mallorquín Enric Gonyalons y la italiana Rosella Urru.

Fernández, trabajadora de una ONG extremeña, ha señalado a su salida del juzgado que aún se encuentra en periodo de recuperación pero que espera seguir colaborando como cooperante, "ya que hay mucha gente que necesita ayuda porque no es autosuficiente".

Sobre la seguridad en los campamentos de refugiados de Tinduf, al sur de Argelia, Fernández ha dicho que "antes eramos intocables, pero ahora somos el objetivo porque estamos allí" y ha pedido a sus compañeros que extremen las medidas de protección.

El juez Pedraz abrió diligencias de investigación cuando los tres activistas fueron secuestrados en octubre de 2011. Lo más probable es que también tome declaración en los próximos días a Enric Gonyalons.