Avance sin estridencias

Alemania y Francia fueron la excusa de las Bolsas para subir. Sobre todo Alemania, cuya desaceleración es menos profunda de lo esperado. En el segundo trimestre del año creció un 0,3%, una décima más de lo esperado por los analistas. Bien es verdad que en el trimestre anterior crecía a un ritmo del 0,5% trimestral. Francia, por su parte, se estancó el trimestre pasado, lo que iguala su comportamiento al del primer trimestre del ejercicio. Los analistas esperaban una contracción del 0,1%. Fueron los datos con los que se despertaron los mercados europeos. Y, por tanto, la apertura fue al alza.

Las noticias que vinieron detrás no fueron capaces de revertir esa tendencia. Por ejemplo, el PIB del conjunto de la eurozona que, de acuerdo con lo previsto, se contrajo un 0,2% en tasa trimestral, frente al estancamiento del trimestre anterior. El índice de confianza Zew, mejoró levemente en la zona euro (desde los -22,3 hasta los -21,2 puntos), pero en Alemania se deterioró: cayó desde los -19,6 hasta los -25,5 puntos, frente a 19,3 puntos negativos en que los analistas habían previsto el deterioro. Eso, respecto al clima económica. La visión de la situación actual de la economía alemana fue mejor de lo esperado.

Pero otra buena noticia vino de la producción industrial de la zona euro en el mes de junio, que se redujo un 0,6%, una décima menos de lo esperado. Y otra buena noticia: el Tesoro griego logró colocar más de 4.000 millones de euros en Letras a tres meses, una cantidad que supera en un 30% el objetivo previsto. Además, se trata de la mayor emisión de deuda a corto plazo llevada a cabo por el país desde que recibiera el segundo rescate en marzo de 2012, aunque para ello tuvo que incrementar los intereses hasta el 4,43% desde el 4,28% de su emisión anterior a ese mismo plazo.

Por la tarde las buenas noticias vinieron de Estados Unidos. En concreto, de las ventas minoristas, que crecieron un 0,8% en julio, por encima del 0,3% que esperaban los analistas. Excluyendo vehículos y gasolina, el avance fue de un 0,9%, por encima del 0,5% esperado por los expertos. Hay que tener en cuenta, además, que en el mes de junio, lo que ocurría con las ventas minoristas era que se reducían. Además, a Wall Street le ayudaban los buenos resultados presentados por Home Depot. La compañía lideraba los ascensos dentro del Dow Jones con una revalorización que rondaba el 4%.

Sin respuesta excesiva

De todas formas, los avances no fueron ni mucho menos explosivos. Los datos no justificaban más alegría de la que hubo: la desaceleración es una realidad en Europa, incluso en sus potencias más importantes, y la zona euro, pese al impulso (débil al fin y al cabo) alemán, decrece. El índice europeo que más subió fue el Dax alemán: registró una revalorización cercana al punto porcentual. A continuación, el Ftse Mib de Milán, que se apuntó un 0,85%. El tercer indicador más rentable fue el Ibex 35, que ganó un 0,78%, para dar un último cambio en los 7.124,80 puntos. El Cac 40 francés, por su parte, avanzó un 0,70%. Las ganancias del Ftse 100 británico rondaron el medio punto porcentual y las del PSI-20 de Lisboa, el 0,35%.

En el selectivo español, Bankia lideró los ascensos, con una revalorización del 11%, hasta 1,13 euros. Abengoa se colocó a continuación, con una fuerte subida del 10,27%, posiblemente por el cierre de cortos sobre el valor. Sacyr Vallehermoso ganó un 4,95%. Repsol y Gamesa avanzaron más de un 3%. Vemos, pues, una parte alta de la tabla con subidas más que sustanciosas.

Entre los grandes valores, además de la petrolera, destacaron Santander y BBVA, con subidas de un 1,09% y un 0,97%, respectivamente. Entre los bancos, Bankinter y el Popular cerraron con ganancias de alrededor de un 0,75%. CaixaBank avanzó más de medio punto porcentual, mientras que el Sabadell se apuntó un 0,31%. Las entidades financieras españolas lograron cerrar al alza, pues, incluso después de conocerse que su deuda con el Banco Central Europeo marcó un nuevo récord en julio, tras aumentar un 11,3% con respecto al mes anterior, lo que implica que las entidades no tienen fácil el acceso a la financiación por sus propios medios. En negativo, el valor que más cayó fue Inditex: retrocedió un 1,16%. Le siguió Gas Natural, que perdió un 1,06%. Ferrovial cedió un 0,69%. Técnicas Reunidas se colocó a continuación: cedió un 0,58%. ArcelorMittal, Indra, Abertis, BME y Red Eléctrica completaron la lista de valores en rojo.

En el mercado continuo, sólo hubo dos valores que superaron las ganancias de Bankia y Abengoa: fueron Banco de Valencia y Deoleo, que se apuntaron un 23,33% y un 11,48%, respectivamente. En el otro lado de la tabla, los mayores descensos fueron para Quabit y para Bodegas Riojanas, que ganraon un 8% y un 7,22%, respectivamente.

Descenso de la prima de riesgo

En el mercado de deuda, la prima de riesgo de la deuda española registró un ligero descenso: cayó desde los 544 hasta los 527 puntos básicos. La rentabilidad del bono a diez años terminó la sesión algo más lejos del 7%: terminó la jornada en el 6,72%. Y no sólo se debió a la caída de la rentabilidad del bono español a diez años, también se produjo un aumento de la rentabilidad del bono alemán desde el 1,40% hasta el 1,46%. La prima de riesgo de Italia se redujo desde los 447 hasta los 433 puntos básicos. La rentabilidad de su bono a diez años bajó desde el 5,87% hasta el 5,8%. Eso significa que el diferencial de rentabilidad de la deuda española y la italiana ronda los 90-100 puntos básicos. En el mercado de divisas, el euro, que llegó a rozar el nivel de 1,24 dólares en los primeros momentos tras conocerse los datos de PIB de Francia y de Alemania, cerró la jornada en el nivel de 1,2330 dólares.

En el mercado de materias primas, los datos económicos cotizaron al alza en Estados Unidos: el barril de West Texas subía un 0,80%, hasta los 93,60 dólares. En Europa, el barril de Brent cotizaba sin cambios en los 113,63 dólares. El cobre también se mantuvo más o menos plano.