Algunos de los platos de la carta.
GASTRONOMÍA

Mudanza en los fogones del Guggenheim

‘Nerua’ es el nuevo restaurante del museo, un laboratorio de alta cocina que pilota Josean Martínez Alija

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Contra el dicho que aconseja no hacer mudanzas en tiempos inciertos, el museo Guggenheim renueva su oferta gastronómica. Lo hace decantándose sin complejos por la alta cocina y de la mano del joven maestro Josean Martínez Alija (1978). Formado en el ‘planeta Mugarizt’ de Andoni Luis Aduriz, Josean lleva doce años al frente de los fogones y manteles del Guggenheim, el restaurante-cafetería al que se accede por su fachada principal y que también muda de piel, de oferta y de carta para convertirse en el nuevo ‘Bistró Gggenheim Bilbao’ que ofrecerá ‘prêt a porter’ a un público mas amplio.

A partir de hoy Josean Marínez pilota una nueva nave, ‘Nerua’, un nuevo y confortabilísimo espacio al que de accede por la contrafachada de ‘Guggy’, el gigantesco perrito floreado de Jeff Koons. Al borde de la ría, con acceso independiente, a resguardo del bullicio propio del atrio, las colas, la tienda y la cafetería, al nuevo santuario gastronómico del Guggenheim se llega divisando dos hitos de la escultura moderna, las amorosa araña de Louise Bouregois, la imponente ‘Mamá’ de ocho patas, y las no menos imponentes bolas de acero de Anish Kapoor.

Corazón

Pegado a la nave central del edificio de Gehry, el corazón de la ‘catedral’ de titanio que alberga las geniales esculturas de Richard Serra, ‘Nerua’ -remota denominación romana de la ría del Nervión- es un espacio minimalista con capacidad para una treintena de comensales.

Quienes accedan a este laboratorio entrarán en una cocina del futuro que respeta y renueva la tradición “con innovación, pasión y diversión” según el jefe de la nao blbaína. Es un espacio diáfano con visión directa sobre una inmaculada cocina ‘hight tech’ en la que se puede seguir en vivo y al segundo el trabajo del equipo de Martínez Alija, una treintena de profesionales jóvenes y entusiastas capaces de convertir una cena o un almuerzo en un experiencia única y memorable y garantía de futuro para el prestigio internacional de nuestra cocina.

A buen seguro pronto dispondrán de la estrella Michelin que, todos coinciden en el gremio, debía estar es su poder hace tiempo. Una ‘condecoración’ difícil de lograr en un espacio misceláneo como el que el restaurante compartía hasta hoy con la cafetería, y mucho más factible ahora que el chef y sus jóvenes pupilos podrán mostrar sus grandes dotes en un espacio mucho mas selecto, tecnificado y funcional.

Sutilezas

Es un ambiente neutro y armonioso sin solución de continuidad entre un comedor y una cocina que comparten materias y colores, como la madera de arce y chapa lacada perforada y lisa. La carta está llena de sutilezas y sorpresas que se pueden atisbar por internet (www.nerua.com), vía por la que se agolpan las reservas. El precio es acorde a los establecimiento de su rango, con un menú de degustación en la frontera de los 80 euros.

Josean Martínez Alija comenzó su carrera culinaria con apenas 17 años. En 1997 se hacía cargo del restaurante del Guggenheim en el que sucedió a Martín Berasetuegui, para ser declarado en 2000 mejor cocinero joven. Desde entonces no ha dejado de ganar reconocimiento pro su estilos revolucionario, purista y ribeteado de originales aromas, texturas y sabores. Ha sabido además rodearse de profesionales jóvenes y que, como él, derrochan talento, como el jefe de sala Urko Mugartegui y la sumiller Maria José Vázquez García.

‘Nerua’ está integrado en el grupo IXO, el sello de alta restauración que integra hoy a restaurante como ‘Mugarizt’ en Rentería, ‘Ni Neu’ y ‘Bodegón Alejandro’ en San Sebastián y todos los espacios culinarios del Gughenheim.

“‘Nerua’es la culminación de trece años de trabajo en los que el restaurante del museo ha sido un referente gastronómico para nuestros visitantes. Trasladmos ahora el placer estético del edificio a este nuevo espacio de vanguardia”, se felicitaba Juan Ignacio Vidarte. Y es que el director general de museo desde su fundación ha sido un de los indesmayables valedoras del maridaje del disfrute gastronómico y artístico.