LEALES. Es fácil ver a la peña Los Desperdigaos cada domingo repartidos por el estadio Chapín.
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La desunión hace la fuerza

Es una peña de reciente fundación, solamente un año de vida la contempla; Los Desperdigaos poco a poco empiezan a monopolizar la grada del Chapín sin hacer ruido, pero con xerecismo

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Cuando uno funda una peña, lo hace con el objetivo de aglutinar a un montón de gente para que entre ellos realicen actividades específicas, fundamentalmente basadas en el ocio, como por ejemplo ver al Xerez Deportivo. Ese es el fin de Los Desperdigaos, (si nadie demuestra lo contrario) contemplar las andanzas cada domingo, ya sea en Chapín o en algún desplazamiento de los de Alcaraz.

Lo que tiene de particular esta peña fundada por Manuel Rego Oca es su carácter independiente, es decir, cuando todas las peñas están centralizadas en un punto, o en un lugar, Los Desperdigaos tienen la virtud de la dispersión. Ellos se encuentran repartidos por todo el campo, de ahí su nombre.

«Cuando decidimos fundar la peña no sabíamos cómo nombrarla. Pensamos mucho en ello, hasta que por fin caímos en la cuenta. Como somos un grupo numeroso de amigos repartidos por Chapín, resolvimos llamarnos Los Desperdigaos porque estamos separados físicamente pero unidos por una misma pasión: el Xerez Club Deportivo». Así, sin más, explica Manuel Rego cómo nació el nombre de una peña, que destaca por sus pocas horas de vida ya que se fundó en noviembre del 2005. Cuenta su presidente que a fuerza de la dispersión «ya casi rodeamos Chapín porque tenemos miembros de la peña en Preferencia, Tribuna y Fondo Sur». Únicamente falta el Fondo Norte, tan difícil de llenar como el campo de La Juventud cuando juega el Industrial (o el Xerez B).

A pesar de que oficialmente, la peña data de finales del 2005, ya en la clandestinidad, los miembros de la familia de Manuel Rego organizaban sus viajes para seguir las evoluciones del Xerez. «Nosotros ya hemos viajado anteriormente con el equipo a otras ciudades antes de configurarnos como peña», comenta Rego.

Una peña familiar

Otra peculiaridad que tienen Los Desperdigaos es su vocación consanguínea, el 70% de la peña la componen la unión de dos familias: los Rego Oca, por un lado y los Pérez Robles, por otro. Así, ha ido creciendo gota a gota, nieto a nieto, cuñado a cuñado hasta ir estando presentes en tres de las cuatro partes que componen el campo del Xerez Deportivo.

Lo mejor, viajar

Cuenta Manuel Rego Oca que la sensación más dulce la tienen los miembros de la peña cuando acompañan al Xerez en los desplazamientos. «Eso es lo mejor, cuando más conciencia de xerecismo hay. En Chapín se pasa bien, pero cuando se viaja con el equipo se pasa mejor, porque convives con los miembros de la peña y con otras aficiones». Además, Los Desperdigaos presumen de pacifismo, nunca han tenido problemas con ninguna afición rival y eso que han viajado a diferentes sitios «como Valladolid, Alicante o Madrid, en todos esos lugares nos trataron con deportividad y buen rollo. En Valencia por ejemplo, los aficionados nos regalaron bufandas del Levante», comenta el presidente de la peña.

Ahora que el Xerez de Alcaraz no pasa por un buen momento es cuando más calor humano desprenden Los Desperdigaos. Así lo reconoce Rego Oca: «Somos conscientes de que el equipo no está como al principio y que hay cosas que mejorar, pero nosotros estaremos con el Xerez cuando pierda o cuando descienda».