El Rey intenta mediar en el litigio entre Colombia y Venezuela

El Rey no perdió el tiempo en Portugal y nada más aterrizar se reunió con el presidente colombiano, Álvaro Uribe, para interponer sus buenos oficios en el conflicto que enfrenta a este país latinoamericano con Venezuela. Será, no obstante, una mediación condenada a la nada porque el presidente venezolano, Hugo Chávez, no asiste a la XIX Cumbre Iberoamericana que se inauguró ayer con una ceremonia en la lisboeta Torre de Belem.

Don Juan Carlos y doña Sofía fueron recibidos en el aeropuerto de la capital portuguesa por José Luis Rodríguez Zapatero y la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, quienes llegaron unos minutos antes. Acto seguido, el Rey se entrevistó con Uribe. España ha mostrado en reiteradas ocasiones su voluntad de conciliar los intereses de los dos países enfrentados tras el acuerdo que permitirá la instalación de siete bases de Estados Unidos en suelo colombiano. Chaves, sin embargo, no está por el diálogo. «Podrá pedirlo el Rey de España, pero no hay conversación posible», afirmó el mandatario latinoamericano hace dos semanas. Así las cosas, el Rey escuchó la versión del gobernante colombiano, al que instó, según fuentes diplomáticas, a buscar una solución dialogada a la controversia, agudizada en los últimos días por el lenguaje belicista del Gobierno venezolano. La XIX Cumbre Iberoamericana, reunida en la localidad turística de Estoril, hará además un llamamiento a los dos países para que cesen en una escalada de enfrentamientos de consecuencias imprevisibles.

La de Chávez no es, sin embargo, la única ausencia. Hasta ocho de los 22 gobernantes, más de un tercio, que debían estar en la cumbre han excusado su presencia. Entre ellos, casi todos los países que comparten la filosofía estatista, antiimperialista y populista del 'caudillo' venezolano: Bolivia, Nicaragua, Paraguay y Guatemala. De los miembros de este 'club', sólo el presidente de Ecuador, Rafael Correa, acudió a Portugal por su condición de secretario de turno de la Unión de Naciones Sudamericanas.

Estas ausencias se suman a la ya habitual de Cuba. Su jefe de Estado, antes Fidel y ahora Raúl Castro, no participa en este foro desde hace nueve años. Tampoco está presente el uruguayo Tabaré Vázquez, debido a que en su país se celebra la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Una deserción esperada era la de Honduras, país que estaba citado con las urnas.

Los comicios hondureños, precisamente, planearon sobre la primera jornada de la cumbre para agudizar las ya de por sí diferencias en la comunidad iberoamericana. Un grupo de países, Costa Rica, Perú o Panamá, están decididos a reconocer la legitimidad de las votaciones, frente a Brasil o Venezuela, que rechazarán los resultados.