Comienza el ‘encierro’ de Cádiz

En toda buena historia cinematográfica que se precie, no hay final feliz sin un nudo tumultuoso. Cádiz, con una saga ya sobre sus calles, se enfrenta a una trama tan controvertida como ilusionante. La oportunidad de dar el salto definitivo a la fama o firmar un papel digno de la clase B. La protagonista es una ciudad, entera pero dividida. Expectante, irritada por momentos, curiosa, pícara –seguro que alguno sabe el final antes de que se proyecte– y, al fin y al cabo, festiva.

Escena inicial:un centro cortado al tráfico hasta en sus vías peatonales: Ancha, Sagasta, Cánovas del Castillo y las calles del entorno. El paso de personas estará cortado en momentos concretos, regulado por un dispositivo de 20 policías locales.

Nada de persecuciones, sino vehículos en primera. El plan organizado por el Ayuntamiento, y que arranca desde hoy, prevé que el aparcamiento subterráneo de San Antonio tenga entrada libre, aunque la plaza– albergue de los corrales de los toros y de la carpa de avituallamiento del equipo técnico–, no se podrá rodear completamente. Una única ruta de acceso, Mentidero-Cervantes-Zaragoza; y la calle Veedor como forma de escape.

En los alrededores, escenarios parecidos en cuanto al atrezo motorizado. Pero ¿y los espectadores? Los ciudadanos viven este domingo la primera de las jornadas festivas en las que se espera se convierta la semana de presencia del equipo de Knight&Day. De día, de tarde o de noche, la hostelería más cercana a los puntos calientes del ensayo –hoy– y del rodaje –de lunes a domingo– lampará por servir los aperitivos entre acción y acción. La alegría que se prevé acompañe a Tom y Diaz en su estancia –¿dónde?– en Cádiz sólo puede ser enturbiada por las molestias del encierro. Los comercios tendrán su compensación económica por el parón obligado, 7 euros y medio por metro cuadrado al día, una cuantía que, pese a la última subida ha resultado insuficiente para la mayoría de los empresarios.

Un equipo formado por 262 personas se afanaba ayer en ultimar los detalles en las calles por las que transcurrirá la secuencia gaditana. Mantones de manila, pañuelos rojos y carteles taurinos tapan balcones y paredes. El chiquero de la plaza San Antonio empezaba a tomar forma al mismo tiempo que Novena o Presidente Rivadavia, entre otras vías, quedaban cercadas. Aparecían los primeros rumores sobre Cruise y Cameron Diaz y se hacían las primeras fotos de recuerdo. Claquetas en lo alto, que empieza una de Cádiz.