Caos mortal

El caos en las labores de rescate de cientos de desaparecidos bajo los escombros tras el fuerte terremoto que sacudió el oeste de la isla de Sumatra puede elevar las víctimas mortales evaluadas en 1.100 personas por la ONU si la ayuda internacional no llega a tiempo en las tareas de recuperación de las víctimas. Mientras los padres de la pequeña hispano-australiana de seis años desaparecida en Samoa encontraban milagrosamente su cadáver arrastrado por el tsunami que barrió la isla, los responsables de la Cruz Roja señalaban las fuertes carencias de equipos especializados en Sumatra, y Filipinas para afrontar una catástrofe de estas características. Pero la peor constatación proviene de las zonas del desastre donde hoteles de construcción precaria, que vulneraban la legislación de construcción antisísmica, han sepultado en vida cientos de personas bajo sus ruinas.