«Me quedé viuda hace año y medio y ahora no sé como afrontar esto»
Hace dos semanas, Rosario Fernández recibió una carta del Ayuntamiento en la que se le comunicaba que debía afrontar la ejecución de obras de seguridad en su domicilio, un primer piso situado en la calle Cobos, número 2. La fachada del inmueble, que data de 1857, fue rehabilitada por la Junta de Andalucía en el año 2003; sin embargo, las zonas comunes, como el patio, el patinillo y el portal cuenta con diversas humedades y grietas.
Actualizado: GuardarEl olor a humedad en la vivienda de Rosario se deja notar sólo con entrar. En la cocina una parte del techo mana agua cada vez que «la vecina de arriba abre el grifo o utiliza la lavadora porque los bajantes están mal», aclara mientras enseña un trapo y un cubo, un remedio casero con el que recoge el agua.
Las paredes de las habitaciones también tienen humedades y grietas y el suelo del piso es curvilíneo. «Desde que recibí la carta no sé qué hacer porque no tengo dinero. Yo vivo aquí desde hace 45 años, me vine con mi marido al casarnos. Espero que alguien, el Ayuntamiento o la Junta, me ayude económicamente para arreglar mi casa, pues yo no sé que hacer», comenta al tiempo que enseña con preocupación el comunicado del Consistorio.
