El Gobierno admite que vendrán trimestres «difíciles» a los que hará frente sin «derrotismo» ni «pesimismo»

Los datos económicos siguen sin acompañar. La inversión ha retrocedido por primera vez en doce años y eso podría tener repercusiones todavía más graves en el empleo. De hecho, España está a la cabeza en destrucción de puestos de trabajo en la Unión Europa. El futuro más inmediato no será mucho mejor. Así lo ha reconocido la vicepresidenta De las Vega, que en el primer Consejo de Ministros tras el parón estival, ha advertido de que los nuevos trimestres “serán difíciles”.

La vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, ha explicado que en los próximos meses el Gobierno hará frente a "las dificultades económicas con realismo, pero sin derrotismo y con rigor pero sin pesimismo". De la Vega ha hecho estas afirmaciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que ha informado de las principales líneas de trabajo que llevará a cabo el Gobierno en los próximos meses.

El Gobierno se aferra al optimismo

La vicepresidenta ha hecho hincapié en que el Ejecutivo seguirá trabajando para atenuar las consecuencias de la desaceleración económica, poniendo en marcha medidas y planteando propuestas, y que desarrollará su labor con "con prudencia y con rigor". Tras señalar que los nuevos trimestres "serán difíciles", De la Vega ha insistido en que el Gobierno hará frente a las dificultades "con realismo, pero sin derrotismo, con rigor pero sin pesimismo".

A pesar de la desaceleración económica, ha incidido en que seguirán avanzando en "derechos sociales y en los servicios a los ciudadanos" y ha añadido que en ningún caso "se dará un paso atrás en materia de derechos". "Seguiremos avanzando en igualdad, en solidaridad y en cohesión", ha apuntado la vicepresidenta, para añadir que también se va a seguir trabajando para la cohesión territorial, en materia de infraestructuras, en concreto en el ferrocarril y carreteras.

Habrá acuerdo en financiación

Sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, ha insistido en que buscarán "un equilibro entre los intereses de las comunidades autónomas y el Estado en su conjunto, siempre con voluntad de acuerdo". La vicepresidenta primera del Gobierno, se ha mostrado convencida de que en tres meses se llegará a un acuerdo para "recomponer el puzzle" de la financiación autonómica y se aprobará un modelo en el que ganarán todas las autonomías.

La vicepresidenta ha recordado que los objetivos del Ejecutivo en esta materia son claros: mejorar los recursos de los gobiernos autonómicos, aumentar la autonomía de las comunidades autónomas y mantener la cohesión y la seguridad interterritorial, de forma que "los intereses de las comunidades autónomas y los del Estado encuentren en ese acuerdo el equilibrio".

Además, ha especificado que, en el caso de Cataluña, se hará "atendiendo a sus dificultades concretas de financiación y cumpliendo con el nuevo estatuto". "Vamos a trabajar para que el acuerdo sea posible en 3 meses, como dijo ayer el vicepresidente, Pedro Solbes". Para ello, "vamos a intensificar las negociaciones y a buscar un acuerdo" en el que ganen todas las comunidades autónomas. "Partimos de un modelo en que todas las comunidades son perdedores, así es que la historia que empieza ahora es una historia de ganadores".