Calderón regresa a la normalidad

No habrá más experimentos. Antonio Calderón tira de lógica, recupera la normalidad en la alineación. Ayer, el entrenador del Cádiz trabajó a puerta cerrada y preparó sin testigos el derbi ante el Xerez Deportivo. Hora y media de sesión táctica en la que expuso sus ideas y ensayó con el equipo titular.

Algunos cambios. Cosa lógica tras la derrota de Elche y las posteriores críticas hacia ese arriesgado once inicial. El técnico combinará equilibrio, calidad y velocidad, en detrimento del toque que obligaba a aglutinar a gente talentosa en la zona ancha sin beneficio para el equipo.

La parcela defensiva estaba clara. Desde la llegada de Calderón, el conjunto amarillo sólo ha encajado dos goles en tres partidos y el entrenador se ha mostrado satisfecho en este apartado. Contreras vivirá su primer derbi con la amarilla, escoltado por Paz, De la Cuesta, Vicente y Vella. El lateral argentino, que el año pasado goleó en dos ocasiones a los azulinos, suple al sancionado Cristian, mientras que el charrúa es fijo porque Raúl López no está recuperado.

A partir de ahí llegan las novedades más importantes. Diego Rivas y Juanjo Bezares formarán un doble pivote rocoso en el que prima el corte sobre la salida de balón. Fleurquin vio la roja en Elche y Miguel no se ha recuperado de sus problemas de rodilla.

Soluciones ofensivas

Con este mediocentro de enormes garantías defensivas, Calderón se centra en solucionar los problemas ofensivos de su equipo. El gaditano aún no ha cantado un gol desde el banquillo. Por ello, dará un giro radical e introducirá a sus mejores bazas, independientemente de su momento físico o psicológico.

El técnico quiere aprovechar las bandas ante un rival que cederá el balón a los amarillos, y por ello es un hecho el regreso de Enrique. El extremeño, que jugó el último partido de Carranza con gripe, ocupó el banquillo en el Martínez Valero. Pero, una vez que está al cien por cien, es indiscutible ya que es el único con capacidad de desborde en el uno contra uno. En el otro ala, es más que probable la inclusión de Gustavo López, aunque Calderón no ha querido dar demasiadas pistas y no hay que descartar a Nano.

Y arriba, cambios significativos. Lobos ocupará por fin la media punta y será el futbolista escogido para tirar del carro. El entrenador y Buenaventura se quedaron ayer hablando un buen rato tras el entrenamiento con el argentino, a fin de motivarle. La víctima es Pavoni, que ha estado a un nivel muy bajo en los últimos choques y que tiene un hueco guardado en el banquillo.

Arriba, Calderón prueba con Gastón Casas, el único delantero que ha marcado, y se reserva a Dani para la segunda parte. En temporada oficial, el trianero ha disputado sus mejores minutos como revulsivo, destacando el encuentro copero ante el Granada 74.

Son las cartas de Calderón. A priori, las mejores. Las más adecuadas para afrontar un duelo de tal calibre. Sabe que se la juega, y apuesta por la calidad. Por fortuna, esta vez no tendrá que motivarles.