Los funcionarios temen trato de favor a los que solo empleen el valenciano

La decisión por parte de la Generalitat de que el valenciano sea la lengua habitual de comunicación en la Administración ha generado nerviosismo entre los funcionarios por la afectación que pueda tener en su promoción interna. Así lo han trasladado a varios sindicatos después del acuerdo por parte de la Comisión Interdepartamental para la aplicación de la ley de Uso del Valenciano.

Algunas consellerias ya han comenzado a trasladar esta cuestión a sus trabajadores. Es el caso de la de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, que ha remitido un escrito a los empleados públicos en el que se recogen dos objetivos.

El primero, que las comunicaciones internas entre los diversos órganos y unidades administrativas se redacten «preferentemente en valenciano».

El segundo, que en los escritos que excedan el ámbito de la Conselleria, los encabezamientos a otros departamentos u organismos de la Generalitat y de su sector público se redactarán también preferentemente en valenciano. En el caso de los dirigidos a otras administraciones o a personas particulares, se redactarán de acuerdo con la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, en la que se establece que en los procedimientos de las comunidades autónomas y de las entidades locales, el uso de la lengua se ajustará a lo previsto en la legislación autonómica correspondiente.

Esta preferencia del valenciano supone que los funcionarios necesiten un alto conocimiento de la lengua, un requisito que no se cumple a rajatabla en el acceso a la función pública -y que rechazan sindicatos como CSIF, desde donde defienden en que solo sea considerado un mérito-. Su temor, según transmiten, es que la Administración tenga «trato de favor» hacia aquellos que muestren un dominio superior y, por tanto, los que no se encuentren en esta situación sean relegados a puestos inferiores.

Cooficialidad

El vicesecretario de Ideas, Principios y Valores del PPCV, Luis Santamaría, denunció ayer esta situación porque, aseguró, se ha tratado de una decisión «unilateral» de la Comisión Interdepartamental. Al respecto, aludió a una «posible vulneración de la cooficialidad de las dos lenguas y un derecho fundamental» y a que pueda darse el escenario de que se seleccione a «funcionarios pata negra» por el dominio del valenciano y que otros sean apartados por lo contrario. Su formación está analizando si con este escrito «se puede producir vulneración de derechos fundamentales» y, de hacerlo, presentarán un recurso contencioso-administrativo.