La plantilla y Urbaser se sentarán el 2 de julio para negociar el nuevo convenio

Llevan desde el pasado mes de diciembre intentando retomar las negociaciones para la mejora de su convenio y por fin los trabajadores de la adjudicataria del servicio de basura (Urbaser) se sentarán con la empresa. Será el próximo miércoles 2 de julio y sobre la mesa pondrán la propuesta de acuerdo realizada por el comité de la plantilla y que se basa sobre todo en mejoras sociales. Hay que recordar que el actual ya se encuentran caducado y que este encuentro se produce tras ser denunciada la situación por los representantes de los empleados, a los que se les comienza a agotar la paciencia con este asunto.

Sobre todo, porque no hay grandes reivindicaciones y han sido sensibles con la situación económica. Aún son conscientes de que esta negociación no será sencilla por el momento en el que se encuentra la empresa y la incertidumbre de saber si continuará ejerciendo el servicio o el Ayuntamiento cumplirá con su compromiso de rescindir el contrato, como anunció en febrero del año pasado.

Cambios de horarios, modificaciones en los turnos de vacaciones o mejora del fondo sanitario, son algunas de las peticiones que se realizan por parte del comité. En cuanto al tema salarial, lo único que se pide es un sueldo ajustado a una estimación de subida del IPC del 2%.

Pero lo cierto es que desde Urbaser no hay disposición de abrir el diálogo de la revisión del convenio hasta que no se aclare su futuro en San Fernando. Han pasado ya 16 meses desde que el Consistorio anunciara una medida amparada en incumplimientos graves del contrato y ante la peor campaña de Reyes de la historia de la ciudad.

Precisamente, a final de 2013 se dijo que el nuevo pliego estaba a punto de concluirse y que sólo quedaban cuestiones administrativas. Algo que se volvió a remarcar hace un par de meses, esperando que pudiera concretarse su licitación, como muy tarde, a lo largo o finales del verano. La realidad es que aún se desconoce cuándo se quitará el contrato a Urbaser para sacarlo de nuevo a licitación. Se trataría de un concurso público que recogería un millón de euros más para mejoras en la limpieza, convirtiéndose en el contrato más importante de la ciudad al superar los ocho millones de euros al año.

Desde Urbaser ya se dejó claro que se decanta por una ruptura amistosa, ya que su pretensión es presentarse de nuevo para optar a la adjudicación y seguir prestando un servicio del que hace tiempo que no se da ninguna queja. La empresa se ha puesto las pilas y ha aumentado el uso de máquinas y frecuencia de diferentes labores, el caso de baldeos, así como en lo referente a las zonas de actuación.