Un título de bandera

La selección española de fútbol ha conseguido que durante al menos un par de horas olvidáramos la difícil situación que atravesamos los españoles por la maltrecha economía que nos azota. Más de cuatro millones de personas continúan engrosando las listas del paro, a pesar de que ayer se conociera que han aumentado las contrataciones en este país durante el mes de junio. Un dato esperanzador, aunque me temo que no tendrá continuidad más allá del verano. Pero lo dicho. Los chicos de Vicente del Bosque han conseguido que los españoles volvamos a sonreír con su excelente triunfo en la Eurocopa 2012 que acaba de finalizar. Algunas personas hablan de frivolidad por el hecho de que las calles de Madrid se llenaran de gente, ataviadas con banderas, para celebrar un acontecimiento histórico en el mundo del deporte rey. Señalan que, con la que está cayendo, no hay motivos para celebrar que el fútbol español se haya consolidado como referente al obtener el tercer título en cuatro años. Además de sus méritos futbolísticos, que son muchos, los jugadores de La Roja, han demostrado una solidaridad excelente como compañeros. No ha habido quejas de los que no jugaban, tampoco de los que eran sustituidos durante los encuentros. Ese pase generoso de Torres a su compañero de equipo Mata, fue otra muestra de que sus integrantes forman una auténtica piña. A lo mejor ahora no lo valoramos suficientemente, pero estos chicos, con Del Bosque a la cabeza, están haciendo historia.