Ruego para que la Junta amplíe los horarios de cierre

La preocupación se acerca mucho a la unanimidad en el sector hostelero de Cádiz, la Bahía y buena parte de la provincia. Los números son alarmantes en las cajas registradoras. Otra cosa son los motivos y las soluciones. Aunque la mayoría admite que influyen factores muy diversos, de la climatología a una situación económica que desborda los límites provinciales y regionales, muchos apuntan a la necesidad de modificar los factores que sí son solucionables a escala local o regional. Una clave aparece como fundamental y puede solventarse con un debate inminente. Se trata de la limitación de horarios. En la actualidad, según una orden de la Consejería de Gobernación de la Junta de Andalucía aprobada en 2003, el horario de fin de servicio en las terrazas y los bares de Cádiz está fijado a las dos de la mañana.

El Ayuntamiento, al que muchos hosteleros achacan un celo excesivo en el cumplimiento de esta normativa, se limita a cumplir lo que dicta una administración superior. La solución, por tanto, debe proceder del Gobierno de Andalucía. Antonio de María asegura que está «a la espera de una respuesta» por parte de Francisco Menacho, consejero de Gobernación y Justicia. El presidente de la patronal hostelera provincial asegura que hace muchas semanas que solicitó un encuentro de carácter urgente y que el considerable descenso de ingresos de los negocios durante este verano aún hace más necesario ese diálogo. De María espera que la Junta entienda que «los horarios actuales no tienen sentido. Responden a una orden de 2003, cuando se trataba de combatir el botellón controlando los horarios de los locales, algo que luego se demostró que no estaba relacionado. Ahora, ocho años después, aún tienen menos sentido. Los locales están insonorizados, se ajustan a una legislación estricta».

El presidente de los hosteleros asegura que se crean agravios «porque unas ciudades cumplen ese horario y otras no. En el caso de Cádiz, algunos visitantes se preguntan si han venido a una ciudad-dormitorio. No es normal que a las dos de la madrugada les echen de las terrazas. Eso va contra el negocio, contra el empleo y contra el turista, que se encuentra sin oferta. Igual que no podemos ofrecer desayunos a las siete de la tarde, no se pueden ofrecer copas a horas en las que la gente no las pide, no tiene sentido».

Además, De María afirma que la normativa no hace distingos entre zonas turísticas y las que no lo son: «No tiene ni pies ni cabeza que los bares, en agosto, tengan que cerrar a la misma hora en Jaén que en Marbella».

Todas estas cuestiones son las que Antonio de María, en nombre de los empresarios hosteleros de la provincia de Cádiz, pretende trasladar a Francisco Menacho, del que dice no tener respuesta.

Otros hosteleros, a título particular, reclaman que en el debate también participe la Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Cádiz para revisar la aplicación de este límite horario, así como la necesidad de mejorar actuaciones concretas en limpieza, transporte público y seguridad.