La reducción del déficit del Estado se estanca en octubre

El Estado fue incapaz de sostener en octubre el ritmo de reducción del déficit que exhibió en septiembre. Los números rojos de la administración central apenas variaron una centésima, según la cifra adelantada por el ministro de Hacienda. Cristóbal Montoro avanzó que el déficit hasta el décimo mes se situó en el 3,92% «en términos homogéneos», eufemismo usado para designar el peculiar cómputo que puso en marcha su departamento, consistente en descontar algunas partidas como si no existieran. La cifra no sirve a efectos de cumplir el compromiso adquirido con Bruselas (4,5% para Estado y Seguridad Social en 2012), pero su evolución ilustra el comportamiento del saldo presupuestario real.

El déficit «en términos homogéneos» se calcula sin tener en cuenta los adelantos de transferencias a otras administraciones (comunidades autónomas, entidades locales y UE) y el distinto calendario de devoluciones fiscales. Hasta octubre ese cómputo 'homogéneo' arrojó un desfase entre ingresos y gastos del 3,92% del PIB (41.183 millones de euros), apenas una centésima menor que el 3,93% que arrastraba el mes anterior. Esa cuenta tampoco incluye el balance de la Seguridad Social, que cerrará 2012 con un punto de déficit (10.000 millones), según reconoció el Gobierno.

En septiembre el Estado hizo una exhibición de músculo y logró una considerable reducción del déficit. El resultado 'homogéneo' del 3,93%, aún enjuagado, fue bastante inferior al 4,26% que marcó en agosto esta particular cuenta. Y el agujero en términos de contabilidad nacional, el que interesa a la Comisión Europea a efectos de los compromisos de estabilidad que adquirió España, cayó en parecida proporción, hasta el 4,39%, frente al 4,77% de agosto (de nuevo, sin incluir a la Seguridad Social). Por eso el parón de septiembre en la reducción del desfase 'homogéneo' sugiere que el comportamiento fue muy parecido en el real.

De ser así, el Estado habría cerrado octubre con un déficit de contabilidad nacional en el entorno del 4,39% que marcó el mes anterior. Un resultado que, pese a estar por debajo del 4,5% presupuestado para finales de año, complicará sobremanera cumplir el objetivo. El motivo es que ese 4,5% deberá incluir el agujero de la seguridad social que según ha reconocido el Ejecutivo será del 1% del PIB. Eso obligaría a rebajar el déficit real del Estado al 3,5% en solo dos meses. Una meta que, salvo ajustes adicionales, parece muy complicada.

Optimismo

Frente a esas señales de descuadre, Montoro prefirió mostrarse optimista. Durante la XI edición de los Premios Autónomo del Año, el responsable de Hacienda aseguró que el déficit del Estado evoluciona de acuerdo con las previsiones del Gobierno y está «en la senda correcta» para alcanzar el objetivo previsto a final de año. «Un gobierno que es capaz de reducir el déficit público más de dos puntos del PIB en un año de recesión, es un gobierno que merece la confianza de los inversores y de los emprendedores», resaltó.

El ministro de Hacienda insistió en que este año «vamos a cumplir el objetivo de déficit público y por ello los agentes económicos van a saber que el año que viene también vamos a cumplir». Montoro explicó que la reducción de los números rojos «es financiación para la economía productiva». La política de austeridad y ajustes para atacar ese desfase -detalló- tiene cono «fin» facilitar el acceso al crédito a las pequeñas empresas y autónomos.

La secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos, Marta Fernández Curras, se declaró igual de confiada en que el Estado será capaz de realizar sus objetivos en 2012. Las medidas de consolidación que ha diseñado el Gobierno están pensadas «para dar cumplimiento en el último trimestre del año» a esas metas, indicó.

Fernández Currás confió además en que las cifras macroeconómicas traerán alegrías adicionales. Durante su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Senado auguró que la caída de la actividad económica será en el cuarto trimestre «algo menos negativa» que el 0,3% registrado entre julio y septiembre.