El problema de una estrella

Y no es mía la sentencia, por eso quizá sea sentencia. Por eso se debe aplicar a este vino, a este Finca El Grajo Viejo. Y por eso este tinto de Bodegas Protos no alcanza a ser estrella, aunque se aproxime a ella. «El problema no fue hallarte, el problema es olvidarte». Y el problema en el caso que nos ocupa es tanta barrica nueva de roble francés utilizada para engrandecer una extraordinaria uva y que al fin empequeñece sus virtudes. El problema no es que exista esa madera, el problema es poder olvidarse de ella. Cierto, cuando toda la elegancia y la finura, cuando la fruta en su punto justo, cuando la belleza prima, aparece, de nuevo, toda la barrica.

Y eso no es. La sentencia es del cantante Ricardo Arjona. Y hay más: «El problema no es quererte, es que tú no sientas lo mismo». Quizá incluso ya las haya utilizado, pero no con un vino tan impactante, poderoso, genial, saber y sabor, viña bien vieja… Finca el Grajo Viejo debiera ser una estrella. Quererle y que te quiera. Un vino inmenso no merece tanto encierro si estaba destinado desde su nacimiento a habitar en el firmamento. Como estrella que era.