Los chicos más ligones de las series de televisión

Barney Stinson (Cómo conocí a vuestra madre)

El segundo mejor amigo de Ted Mosby, consiguió quitarle punto de protagonismo al personaje principal de esta divertidísima sitcom. Barney y sus trajes han visto desfilar por delante de sus ojos a las mujeres más atractivas y rápidas de cascos de Nueva York, y lo ha hecho siendo un frikazo con un estilo ‘LEGENDARIO’.

Charlie Harper (Dos Hombres y medio)

Que un tipo de mediana edad con camisa de bolos y pantalones cortos consiga ligarse a toda hija de vecino no es que sea muy creíble, pero claro está, cuando uno descubre sus bondades, empieza a entenderlo.

¿Es de suponer que la mezcla de dinero, casa en la playa y trabajo interesante atrae al sexo contrario? Parece que sí, e incluso yo diría más, a día de hoy esos factores pueden llegar a atraer hasta gente del mismo sexo.

Don Draper (Mad Men)

Jon Hamm dio vida a este promiscuo personaje que, aprovechando su posición y el momento (los 60 fueron unos años de descubrimiento sexual en USA), ponía cuernos a diestro y siniestro a la vez que seducía a toda mujer que se ponía a tiro.

Hank Moody (Californication)

Escritor de éxito, divorciado y con la cara del tío que protagonizaba «Expediente X» . Sin duda, el protagonista de «Californication» tenía en su haber un montón de bazas para no estar solo ni un momento, y como se vio a lo largo de la serie, supo usarlas para camelarse a todo tipo de chicas.

Joey Tribbiani (Friends)

El compañero de piso de Chandler no era el más listo, ni tampoco el más rico, pero su sonrisa y su forma de ligar (haciendo que cualquier cosa pudiera sonar ‘sexy’) lo convirtieron en el ligón por excelencia de «Friends».

Aunque Ross también tuvo un buen número de novias a lo largo de la serie, el sr. Tribbiani se quedó con la medalla de oro ligándose a personajes con caras tan conocidas como la de Elle Macpherson.

Lucas Hood (Banshee)

Los tipos malotes venden y sin duda, el sheriff de recambio que vigila el pueblo de Bansheelo sabe de sobras. Aunque la cosa se ha relajado un poco en la tercera temporada, durante las dos primeras era raro no verle el culo al jefe Hood dándole lo suyo a alguna pueblerina.

Noah Puckerman, aka Puck (Glee)

Este personaje rebelde de la serie musical de Ryan Murphy y Brad Flachuk (el tándem creador de « American Horror Story») reúne la mayoría de tópicos de los chicos malotes tradicionales. Aunque no es ni rico ni cumple con el estereotipo de galán, causó estragos entre las chicas de «Glee»

Ragnar Lothbrok (Vikings)

Viajamos al pasado para encontrarnos con este personaje que tiene tanto de real, como de mito. En la serie « Vikingos», Ragnar tiene a su esposa, pero como mandaban los cánones de la época, se iba tirando a todo lo que se ponía a tiro. En la segunda temporada se casa con una princesa (Aslaugh), pero eso no evita que haga de las suyas en sus incursiones por el extranjero. Eso sí, no creo que Ragnar celebre San Valentín.

Sterling Archer (Archer)

El tipo más sinvergüenza de la televisión animada actual usa su dinero, sus influencias y dotes de espías para llevarse al catre a todo bicho viviente (incluido chicos). Además de todo eso, y a pesar de un dibujo animado, reúne características del galán de los 70 y eso, junto a sus trajes y su labia lo hacen irresistible.

Walden Schmidt (Dos Hombres y medio)

Si Charlie Harper era un crack con las chicas pese a su edad y su vestimenta, Walden, que es joven y tenía más pasta, no podía ser menos.

Curiosamente, este millonario tenía su corazoncito, y aunque creaba sensación entre las chicas de Malibú, no gustaba de los excesos de los que disfrutaba el anterior propietario de su casa.