Comparativa del Samsung Galaxy S7 frente a sus rivales Android

Galaxy S7

Samsung ha apostado a caballo ganador con el nuevo Galaxy S7. Su nuevo buque insignia en materia de movilidad ha mantenido la estética de su predecesor, pero ha ahondado en una serie de características, algunas de ellas señas de identidad en el pasado de la marca surcoreana y, otras, con la mirada puesta de largo hacia sus más directos competidores.

El nuevo teléfono móvil inteligente vuelve a apostar por dos versiones diferenciadas, una de las más llamativas es la versión Edge, que tiene los bordes de la pantalla ligeramente curvados. Esta innovación, no obstante, se ha mantenido en esta temporada en la que Samsung necesita un revulsivo para volver al crecimiento de su división de móviles.

La pérdida de ventas no es exclusiva de esta marca, puesto que hasta Apple, que pareciera ajena, también ha empezado a sufrir una cierta saturación del mercado. El nuevo «smartphone», de gama alta, ha recuperado la ranura para tarjetas microSD, siendo esta una parte fundamental para muchos consumidores. Podrá albergar hasta 200 GB de capacidad añadidas, una cantidad nada despreciable para almacenar toda nuestra vida en fotografías y vídeos.

También, y en otro giro hacia el pasado más reciente, ha mejorado la resistencia del terminal, haciéndolo sumergible incluso, una prestación de la que Sony ha hecho gala en los últimos años. Es resistente al agua o el polvo (protección IP68). ¿Será esta la decisión final de las marcas en un futuro?

Con pantalla de 5.1 pulgadas y estructura convencional, el Galaxy S7, que incluye capacidades para cargarse de forma inalámbrica, incorpora una potente cámara con tecnología Dual Pixel Sensor, propia de las cámaras profesionales, cuya velocidad es, sobre papel, superior a todos sus rivales.

Además, y en una decisión que constata el interés cada vez mayor de una tecnología incipiente como la realidad virtual, la firma ha convertido a este «smartphone» en la puerta de entrada de la experiencia en 360 grados con una cámara, Gear 360, que permite captar imágenes y vídeos en este formato que YouTube ha comenzado a dar soporte.

LG G5

Su rival local, LG, ha impactado con su nuevo terminal, el LG G5, que además de mantener el nivel de la pantalla, ha metido la cabeza en una especie de sistema «modular». Sin estar tan logrado como la informática tradicional, la firma ha dado un pequeño paso hacia lo que un futuro podrían ser los móviles modulares, es decir, que los usuarios puedan jugar con sus piezas para mejorar sus prestaciones.

De altas prestaciones técnicas como el Galaxy S7, el LG G5, también de gama alta, permite acoplar a la batería tres módulos que añaden distintas funcionalidades: cámara digital con botones físicos, batería adicional y altavoz de alta definición marca Bang&Olufsen.

De un tamaño ligeramente superior a su rival Galaxy S7 (5.3 pulgadas), cuenta con unas prestaciones inigualables en estos momentos. Con 4 GB de memoria RAM, resolución: 2.560 x 1.440 (554ppp) y Qualcomm Snapdragon 820 (el mismo que el Galaxy S7), este terminal suma con una cámara dual de 16 megapíxeles que da la posibilidad de utilizar un gran angular (8 megapíxeles), aunque la velocidad del autoenfoque y la apertura no es tan rápida como su rival. Juntas, eso sí, pueden capturar en modo gran angular de hasta 135 grados, casi dos veces más que cualquier otro «smartphone».

A diferencia de su rival, tiene una capacidad de 32 GB, aunque es posible ampliarla hasta 2 TB mediante el empleo de una tarjeta microSD. Al igual que el Galaxy S7, el LG G5 incorpora un sistema, «Always On», que permite que la pantalla principal siempre esté encendida para mostrar la hora, la fecha, el calendario o las notificaciones. Su batería, 2.800 mAh, es inferior a la de su rival (3.000 mAh).

Sony Xperia X

Sony, por su parte, ha decidido simplificar su catálogo de móviles. Tal vez es una postura interesante para comprobar la fortaleza de los fabricantes. No hay que olvidar que Apple, desde hace dos temporadas, presenta anualmente dos modelos de terminales, mientras que sus rivales basados en Android inundan el mercado con todo tipo de formatos y gamas.

La firma japonesa ha decidido cambiarlo. Para ello, ha aglutinado las gamas E, M y Z en una sola, X. De nuevo, el fabricante vuelve a partir con ventaja en materia de fotografía. De hecho, ha intentado llevar su experiencia en este campo, en donde son líderes en en el formato réflex, al mundo de la telefonía. Para ello, ha incorporado un sensor de 23 megapíxeles, un portento técnico que supera con creces a todos sus rivales.

De 5 pulgadas y resolución 1.920 x 1.080 (inferior a la de sus rivales), el modelo Xperia X Performance, cuenta con 3 GB de memoria RAM y una capacidad que varía entre 32 y 64 GB, aunque de nuevo entra en juego la posibilidad de ampliarla hasta 200 GB mediante tarjeta microSD. De cuerpo metálico y diseño excepcional, cuenta con 2.700 mAh de batería, algo escasas comparación al resto.

Xiaomi Mi 5

Gama alta a poco precio es la base con la que sustenta Xiaomi, que ha presentado en el Mobile World Congress de Barcelona, el Mi5. Este terminal cuenta con una pantalla Full HD de 5,15 pulgadas, está equipado con un procesador Qualcomm Snapdragon 820 (el más potente del mercado en la actualidad); 4 GB de RAM; cámara principal del 16Mpx, con estabilizador óptico de la imagen y con tecnología capaz de reducir el ruido y mejorar la calidad de las imágenes tomadas, y frontal de 4; batería es de 3.000 mAh.

Cuenta también con una tecnología que permite reducir el consumo algo más de un 15% sin que afecte a la visibilidad del teléfono. El Mi5, además, llega con un sensor de huellas que, por primera vez, se sitúa en la parte delantera del móvil.